Al momento de limpiar el hogar, nuestra mente es un caos y no sabemos por donde empezar. Esto genera estrés y preocupación, causando que cada vez que nos toque hacer una limpieza en casa sea un gran problema. Sin embargo, si pones en práctica la regla del 1%, podrás organizar tu cabeza y también todo lo que te rodea.
Pon en práctica este truco de especialistas.
Regla del 1%, la técnica infalible para que limpiar el hogar no cause estrés
Según explica Holly Blakey, influencer especialista en estilo de vida, la regla del 1% puede ayudar a organizar la mente y limpiar el hogar sin morir en el intento. La clave de esta metodología radica en cambiar la mentalidad y comenzar a resolver, de a poco, todo lo que debemos hacer.
En concreto, la profesional señala: “Cuando tengas una lista de un millón de cosas por hacer y no sepas por dónde empezar, deja la lista a un lado y haz una pequeña cosa para mejorar tu hogar 1%”. Aquí la influencer explica que esta simple acción puede ser desde tirar cajas y botellas vacías, hasta poner ropa a lavar o planchar algunas pocas prendas.
Se trata de un acto de limpieza sencillo que generará un cambio en nuestra mente: “simplificar en pequeñas victorias crea un gran cambio interno”, explica la influencer. Así, lograremos dividir un objetivo grande, que será limpiar el hogar, en pequeñas tareas. Además, Blakey explica que esta regla del 1% también puede aplicarse a otros ámbitos de la vida, como el estudio o el trabajo.
Regla de una habitación, otro efectivo método para limpiar el hogar
Si la anterior técnica no te funciona, puedes poner en práctica otra regla que recomienda el sitio especializado ‘El Mueble’. La misma consiste en enfocar toda la energía de un solo día en una sola habitación, olvidándote del resto de la vivienda.
La regla de una habitación sugiere limpiar el cuarto escogido en un orden concreto, haciéndolo sin distracciones. Cuando termines con este sector del hogar, si lo deseas, puedes dar por finalizada la tarea. Y si te sobraron energías, puedes continuar con otro ambiente de la casa, siempre y cuando te asegures de terminarlo ese mismo día y que no quede inconcluso.