Las pitones birmanas generan múltiples problemas en el ecosistema de Florida:
- Devoran aves nativas en grandes cantidades
- Atacan mamíferos pequeños y medianos
- Consumen caimanes jóvenes y otras especies autóctonas
- Alteran las cadenas alimentarias naturales
- Compiten con depredadores locales por territorio
- Se reproducen sin control natural que las limite
robot conejo
Estos conejos robot podrían ser de mucho ayuda para la Florida.
El calentador interno mantiene la temperatura del conejo robot entre 98 y 102 grados Fahrenheit. Esta temperatura imita perfectamente el calor corporal de un conejo vivo. Las serpientes cazan usando sensores térmicos especiales que detectan el calor de sus presas.
Cada robot pesa aproximadamente lo mismo que un conejo real. Los investigadores los programaron para realizar movimientos naturales que engañan a las pitones. Cuando una serpiente ataca al señuelo, los científicos pueden capturarla sin dañar fauna nativa.
Una amenaza que crece cada día
Los Estados Unidos gastan millones de dólares combatiendo esta invasión. Las pitones birmanas devoran aves nativas, mamíferos pequeños y hasta caimanes jóvenes. Su apetito voraz alteró completamente el equilibrio natural de los Everglades.
Cazadores profesionales participan en eventos como el Python Challenge, donde compiten para capturar la mayor cantidad de serpientes. En 2020, un equipo capturó una pitón de 11 pies y 6 pulgadas en los Everglades del sur. Estos esfuerzos no alcanzan para controlar la plaga.
conejo robot
El calor que generan los conejos es la clave para que las pitón los ataquen.
Los conejos robot representan una estrategia completamente nueva. Permiten a los científicos estudiar el comportamiento de las pitones sin poner en riesgo animales vivos. También ayudan a localizar nidos y rutas de movimiento de estas serpientes invasoras.
Dusty Crum, un cazador experimentado, ya probó métodos tradicionales durante años. "Necesitamos herramientas nuevas porque las pitones se reproducen más rápido de lo que podemos capturarlas", admitió. El proyecto de conejos robot podría cambiar esta situación.