Dos familias mendocinas vinculadas al mundo empresarial donaron un comedor comunitario a la Universidad Maza, en lo que desde la institución interpretan como un ejemplo de lo que se puede lograr si se coordinan esfuerzos entre el sector educativo y el empresariado.
Compromiso con la educación
Empresarios mendocinos donaron un comedor comunitario a la Universidad Maza
Gracias al aporte de empresarios mendocinos, la Universidad Maza abrió su primer comedor, un sueño cumplido para ayudar a los estudiantes que lo necesitan
El comedor donado a la Universidad Maza fue inaugurado este viernes.
Detrás de la iniciativa están las familias David y Bernardi, que aportaron fondos para que este viernes se abriera por primera vez el espacio en la sede universitaria ubicada en Bombal y Acceso este.
Laura Horta, directora del programa de Desarrollo Institucional de la Universidad Maza, resaltó en diálogo con Radio Nihuil: "Es una alegría enorme concretar este sueño de muchos años. Pese a todo lo que mucha gente imagina -que en las universidades privadas sobra lo que realmente no hay-, lo que sí tienen los alumnos son ganas de estudiar, compromiso y mucha voluntad de los que hacemos gestión".
Laura Horta destacó los beneficios de este comedor para la comunidad educativa
Horta destacó que ahora la universidad cuenta con un espacio donde los estudiantes podrán comer y conversar. "No lo teníamos. Contábamos con unos lindos toldos donde los chicos con buena voluntad compartían su comida. Porque no todo el mundo puede pagarse un almuerzo fuera de casa todos los días".
La entrevistada contó que hoy la gente que estudia "hace mucho esfuerzo para pagarse una universidad privada" y que en consecuencia observaron que los chicos "por ahí comían en algún escalón, en algún banco".
Añadió: "Este comedor comunitario es un sueño cumplido gracias a dos empresarios muy importantes, de la familia David y la familia Bernardi, que han hecho posible esto en tres meses".
Horta subrayó también que la experiencia es un paso más en el vínculo entre la universidad y el sector empresarial con sus necesidades. "Nosotros a Friolatina y Oscar David, que son dos grandes donantes, hemos podido ofrecerles un relevamiento de salud en todas sus empresas. Hay personas con hipertensión, con enfermedades crónicas, con problemas de nutrición; ofrecemos nuestros consultorios donde se puedan realizar sus pruebas", dijo.
Marcó además que, si se consolida la dinámica, el sector universitario puede ofrecer investigaciones, formación en oficios, cursos de terminalidad educativa para los empleados, etcétera. "Proponemos -sintetizó- un menú importante para que ese empresario se beneficie con todo lo que podemos dar como universidad".
La Universidad Maza y la futura Ley de Mecenazgo
El panorama descrito revela las posibilidades que podría abrir una Ley de Mecenazgo en la provincia. El tema se viene debatiendo en la Legislatura y tiene apoyo del Gobierno, aunque parece avanzar por carriles lentos.
"Necesitamos una ley provincial para que el empresario se vea favorecido con un beneficio fiscal, algo que existe en Europa, Estados Unidos o algunas provincias argentinas -como San Juan-, y que permite que el donante tenga la facilidad de donar para que eso se le reconozca de sus impuestos".
Horta contó que incluso existe la posibilidad de implementar programas para aquellos egresados que quieren ayudar a los estudiantes que aún están cursando. En ese sentido, resaltó que están abiertos a particulares que quieran aportar ideas "para todos aquellos que tengan necesidades".
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