El césped bien cuidado reluce tu jardín en cualquier época del año
Tener un jardín cuidado todo el año no es tarea fácil, y es durante el verano la estación en donde se ven los resultados. Si tu césped no crece, puedes implementar un truco de jardinería que lo ayudará a revivirlo estando como deseas.
El césped puede perder su tono verde brillante y pasar a estar amarillento y quebradizo, como consecuencia de padecer las altas temperaturas o falta de cuidado durante el resto del año.
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El truco secreto para revivir el césped de tu jardín en verano: crecerá más rápido
El truco secreto para revivir el césped en verano
Para revivir un césped que esté en malas condiciones, es importante localizar el problema y aplicar las soluciones correctas. Dentro de la jardinería, un truco muy efectivo consiste en la realización de una aireación.
La aireación se basa en perforar pequeños agujeros en la tierra para que el agua, nutrientes y aire pueda entrar en las raíces. Además, se puede agregar un fertilizante específico que contenga los nutrientes necesarios para su buen crecimiento.
Para solucionar este problema y hacer que el césped disponga de suficiente oxígeno en las raíces, tienes que airear la tierra periódicamente, practicando pequeños agujeros de unos 5 a 10 cm de profundidad, aproximadamente, con algún tipo de aireador manual o mecánico.
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El truco secreto para revivir el césped de tu jardín en verano: crecerá más rápido
Para conseguir unos resultados óptimos en tu jardín, deberás dejar reposar las secciones de tierra una vez que hayan sido agujereadas. Asimismo, es aconsejable dejar en el mismo suelo las partes extraídas de la perforación
Otras formas de revivir el césped
Si consideras que la técnica de aireación no es la adecuada para revivir el césped, puedes implementar otros trucos especiales para lograr el mismo propósito:
Fertilización: para proporcionar los nutrientes necesarios y promover un crecimiento saludable.
Siembra de semillas: para rellenar áreas dañadas o calvas en el césped.
Control de plagas y enfermedades: mediante el uso de pesticidas y fungicidas, si es necesario.
Ajuste del riego: para garantizar un suministro adecuado de agua sin excesos ni déficits.
