Un usuario llamado Shakespeare comentó en CMU.fr: "Esta es una práctica común en la isla Coronado, California. Inteligente y elegante". La técnica funciona especialmente bien con restos de pescado, carne y huesos que van directo al congelador.
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Un truco casero sencillo ayudará a mantener tu cocina libre de olores.
Para implementar este truco casero, necesitas bolsas plásticas resistentes donde colocar los desperdicios problemáticos. Cada vez que cocines o tengas restos orgánicos, los guardas en estas bolsas y las metes al congelador. El día de la recolección, sacas la basura congelada y la pones en el contenedor habitual.
Este método evita que animales como mapaches y zorrillos se acerquen a tu hogar durante la noche. Las moscas tampoco pueden reproducirse en desperdicios congelados, lo que significa menos insectos volando por tu cocina con esta basura congelada.
Consejos adicionales
Denise, otra lectora de CMU.fr, explicó: "Descubrí que usar vinagre de manzana y jabón líquido las atrapa, mantengo pequeños recipientes por toda mi casa en cada habitación para eliminarlas, funciona genial". Este truco casero complementa perfectamente el método del congelador.
La clave del éxito está en ser consistente con la aplicación de este método. No todos los desperdicios necesitan ir al congelador, pero sí aquellos que tradicionalmente causan problemas de olor.