Por otro lado, los cambios de color se dan cuando este tipo de plantas se enfrentan a cierto nivel de estrés como el clima y la temperatura. Sin embargo, hay que entender algo y es que el cambio de color de un árbol de Jade no significa que se encuentre enfermo o que le falte algo.
De hecho, el árbol de Jade es tan fácil de cuidar que es muy difícil que le ocurra algo y su apariencia se venga abajo. Solamente requiere de agua cada ciertos días y que le llegue luz, pero no de manera directa.
Si quieres que tu árbol de Jade luzca sus hojas de color rojo o naranja, lo mejor será colocarlo bajo la luz solar de manera directa. En cambio, si quieres que vuelva a ser verde, hay que llevarlo a un lugar en donde esté bajo una semisombra. De esa manera no recibirá rayos directos del sol y va a tener altos niveles de clorofila.
Por otro lado, para que el árbol de Jade tenga colores cálidos en sus hojas, deberás tenerlo en el jardín. En cambio, si tu idea es tenerlo en el interior de tu casa, el resultado será tener un ejemplar tradicional de esta planta.