La berenjena es una verdura que se destaca por su alto valor energético y nutritivo, además de ser apta para realizar todo tipo de receta. Con un contenido calórico casi inexistente, la berenjena aporta vitaminas, hidratos de carbono, proteínas y minerales de todo tipo, bienvenidos para todo tipo de alimentación saludable.

A esta verdura, que se la puede preparar de mil maneras, es un producto culinario bastante apreciado en la cocina mundial. Se destaca por ser protagonista en recetas al horno, en los más diversos platos, como así también cuando se la cocina asada, a las brasas, al rescoldo.

Entre todas las recetas, la berenjena queda riquísima cuando se la cocina asada, como por ejemplo al calor de las brasas cuando se está haciendo un asado.

Salteada y junto a otras verduras como la cebolla o el pimiento, por ejemplo, su sabor se potencia y distingue si se asa cerca de las llamas, sin contacto directo, claro.

En esta ocasión, hay una receta de berenjenas al rescoldo que es para chuparse los dedos y que comparte el sitio cookpad. Solo basta poner manos a la obra y disfrutar de una ensalada estupenda para acompañar todo tipo de platos.

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Receta de berenjena al rescoldo para chuparse los dedos

Siempre que hay un fuego de por medio, hay que aprovechar unas berenjenas de calidad y arrimarlas al calor de las brasas, para elaborar una receta exquisita, con un sabor intenso y único.

Ingredientes

  • 1 berenjena grande y madura
  • 2 dientes de ajo
  • Aceite
  • Ají molido
  • Pimentón
  • Sal y pimienta
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Preparación de la berenjena al rescoldo

  1. Lo primero que se hace es lavar la berenjena, para luego pintarla con una reducción de aceite pimentón y ají molido.
  2. Arrimar al calor de las brasas, sin que tenga contacto directo con las llamas.
  3. La berenjena estará lista cuando la cáscara esté seca, momento en qué hay que sacarla y dejarla enfriar. Cortar en dos y sacar con una cuchara toda la pulpa. Pisar la berenjena y mezclarla con ajo picado, condimentar con sal y pimienta, y un chorrito de aceite de girasol o de oliva.
  4. Dejar reposar. Los expertos en la cocina sostienen que, guardar esta preparación en un recipiente por 24 horas, hará que sus sabores se potencien.
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