Suarez destacó en el escrito que "Mendoza mantiene un histórico vínculo de hermandad con la República de Chile, y constituye la más importante vía de comunicación terrestre entre ambas naciones" y subrayó "la total disposición para encarar todas las acciones" que propendan a afianzar el vínculo.
"Desaires" y discusión
No es la primera vez que el Gobierno de la provincia deja traslucir su incomodidad por las invitaciones y "des-invitaciones" del oficialismo nacional. De hecho, la delegación que acompañó al presidente a Chile incluyó solamente a una mendocina, la legisladora Liliana Paponet (Frente de Todos).
También es verdad que desde algunos sectores apuntan que no habría sido imposible que Suarez gestionara su propio pase a los actos oficiales. Después de todo, referentes mendocinos como José Octavio Bordón o Carlos Enrique Abihaggle han sido embajadores en el país vecino y quizá habrían allanado con facilidad el acceso a una comitiva local o, al menos, un lugar en el protocolo.
Por otra parte, Nación no envió a los festejos vendimiales a ninguno de sus responsables políticos de primera línea. Sólo a los ministros de Agricultura -Julián Domínguez- y de Turismo -Matías Lammens-. Todo eso puede haber gravitado en el ánimo de Suarez a la hora de escribir su carta.
Aquí, el texto completo: