Femicidio en Las Heras
La casa donde el sospechoso del femicidio tenía las salidas transitorias. Foto: Matías Pascualetti.
Las horas anteriores al femicidio
Flora Moyano y su familia habían decidido no denunciar los hechos de violencia de género, algo que tal vez hubiera salvado su vida. Es que Walter Molina les generaba temor. Claro, estamos hablando de una persona con condenas desde 2003 por delitos como robo agravado, privación ilegítima de la libertad, abuso sexual con acceso carnal y amenazas con armas de fuego.
Según el relato de las víctimas, el mismo sábado en que desapareció la mujer fue una descripción perfecta de la situación de violencia de género en la que estaba envuelta. Walter Molina se encontraba en una de sus salidas transitorias y estaba en el domicilio de su madre, subido al techo, intentando colgarse del suministro de luz.
Walter Jesús Molina Corvalán femicidio Las Heras
Walter Jesús Molina, el acusado por el femicidio en Las Heras.
La mujer evitaba cruzarlo, por lo que sus hijos esperaron que se metiera de vuelta a la casa para llamar a un remís y sacar a Flora Moyano del barrio. Se dirigió a la propiedad de una de sus hijas, donde tenía planeado resguardarse el resto de la jornada.
Sin embargo, Walter Molina se dio cuenta de la situación y logró contactarla telefónicamente para obligarla a que hablaran y "arreglaran" las cosas. Flora Moyano regresó al barrio Democracia de Las Heras, pero antes de ingresar habría sido abordada por Walter Molina quien la llevó al descampado para concretar el femicidio, según sostiene la investigación.
