La noche del sábado, el turista, quien habría llegado recientemente a Mendoza y se alojaba enla calle Rioja, decidió salir a conocer la zona y terminó en un boliche de calle San Martín casiMorón de Ciudad. La noche habría resultado por demás divertida, pero el visitante, desconociendo tal vez lainseguridad local, cometió el error de querer regresar caminando al hostel en el que se alojaba. El británico sólo habría recorrido unos pocos metros, cuando al llegar a la esquina de SanMartín y Morón fue rodeado por cuatro delincuentes, uno de los cuales empuñaba un arma blanca. Los maleantes le habrían exigido a gritos el dinero que llevaba y, pese a no entender elespañol, el turista comprendió la situación en que se encontraba y habría atinado a correr. Su intención fue desbaratada a golpes. Los delincuentes se le abalanzaron y terminarontumbándolo, recibiendo toda clase de patadas y puñetazos. Presuntamente, cuando los ladrones vieronque el visitante ya ni se movía, se dedicaron a vaciarle los bolsillos. De la billetera le sacaron$100 y tuvieron la delicadeza de arrojarle en la cara sus documentos. Con el exiguo botín, la banda desapareció, dejando al turista tendido en la vereda.Aparentemente alguien dio aviso a la policía y los primeros efectivos en llegar solicitaron lapresencia de sus pares de la Unidad Policial de Asistencia al Turista (UPAT), ya que la víctimasólo habla inglés. Esos uniformados fueron quienes interpretaron el relato de la víctima y le aconsejaron quefuera asistido en algún hospital. Minutos más tarde, el desafortunado visitante era revisado en la guardia del hospitalLagomaggiore, donde constataron que presentaba fractura del tabique nasal y varias escoriaciones endistintas partes del cuerpo. En su declaración, el británico asumió que no podía identificar a los agresores, ya que lazona en que fue atacado era oscura y en medio de la golpiza sólo atinó a cubrirse la cabeza y nologró verlos bien. El caso es investigado por personal de la Oficina Fiscal N°1 de Ciudad.
