Julieta Del Pino murió estrangulada con las manos de su asesino. La autopsia reveló "muerte por asfixia", indicaron los voceros del Ministerio Público de la Acusación Fiscal (MPA). Por el femicidio que conmocionó a la localidad santafesina de Beravebú y a todo el país, fue detenido con prisión preventiva el único sospechoso del crimen, Cristian Romero, de 28 años.

El acusado, identificado como Cristian Romero (28), fue imputado por los fiscales Susana Pepino y Matías Merlo del femicidio de Julieta Del Pino cometido entre las últimas horas del pasado viernes y la madrugada del sábado.

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"Alrededor de las 23:30, el imputado se trasladaba por las calles de Berabevú en un vehículo e interceptó a la víctima -con quien había mantenido una relación de pareja- en inmediaciones de Simón de Iriondo y pasaje Padre Galeano", detallaron los fiscales.

Luego, siempre según la acusación, la joven "fue llevada a la casa del hombre ubicada en calle Güemes al 300".

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"Una vez que estuvieron en la vivienda, el imputado la golpeó y le causó múltiples hematomas en el rostro. Luego la estranguló con sus manos y le causó la muerte por asfixia", detallaron.

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Los fiscales señalaron que "finalmente, la víctima fue arrastrada por el imputado hasta el fondo de la vivienda" donde "el hombre investigado ocultó el cadáver en un pozo, luego le arrojó cal y tierra, y lo tapó con una loza de cemento y un tanque de agua".

Los funcionarios del MPA hicieron hincapié en que "la conducta del imputado fue siempre violenta y se enmarca en una situación desigual de poder y subordinación en un marcado contexto de violencia de género".

Era amigo del hermano de Julieta y se ofreció a buscarla

La mamá de Julieta, Fabiana Morón, contó que el sospechoso detenido trabajaba con su hijo y que tras la desaparición de Julieta se ofreció a ayudar a buscarla.

"Esta persona venía a casa porque es compañero de trabajo de mi otro hijo mayor porque trabajan juntos de albañil. Él le mandaba mensajes pero Julieta nunca nada, nunca fueron novios", contó Morón a Radio 2-Rosario.

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La mujer dijo además que el acusado es "un enfermo", ya que tras la desaparición de Julieta el viernes a la noche "fue a trabajar al otro día, estuvo toda la mañana trabajando con mi hijo como si nada hubiera hecho y cerca del mediodía le dijo que iba ayudar a buscarla".

El crimen

Julieta Del Pino fue vista por última vez el viernes pasado por la noche, tras salir de trabajar en un kiosco de la pequeña localidad santafesina de Berabevú, situada a 160 kilómetros al sudoeste de la ciudad de Rosario.

A partir de una denuncia interpuesta por su familia se inició un operativo de búsqueda y rastrillaje que terminó en un inmueble ubicado en la calle Güemes 354, de esa localidad, donde hallaron el cadáver de Julieta enterrado en un pozo tapado con cal.

Según la investigación, en ese domicilio vivía con su pareja embarazada.

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