En diálogo con UNO Santa Fe, Carina Benítez y Noelia Leno, mamás de Franco (19) y Alma (8) e integrantes el grupo Déjame Entrar TGD, explicaron que el objetivo de la iniciativa es lograr que la comunidad sienta empatía y se solidarice con los niños con autismo que sufren con el sonido de la pirotecnia.
"Mi hijo, como muchos otros con diagnóstico de autismo, tiene hipersensibilidad auditiva, por lo que cada vez que siente un estruendo él se pone muy mal y el panorama es muy triste. Él me indica que le duele la cabeza y ese malestar lo lleva a correr por toda la casa, romper cosas y autolesionarse", comenzó a relatar Carina y siguió: "La situación es tan preocupante como triste para toda la familia".
Noelia, por su parte, hizo hincapié en que a su pequeña la situación no la altera sino que la angustia. "Hemos pasado navidades las dos solitas, encerradas en su pieza o en un auto, con ella tapándose los oídos, llorando", dijo y completó: "Es una situación que desespera, porque uno hace todo el año terapias para tratar de evitar o prevenir las crisis, pero esto es algo que no lo podemos manejar, porque no está a nuestro alcance".
Ambas mamás se refirieron a la necesidad de que la comunidad tome conciencia sobre lo que provoca el uso de estos elementos y en este sentido comentaron que buscan que la comunidad se sume a la iniciativa de cambiar el uso de pirotecnia por globos que puedan ser lanzados al cielo con mensajes de amor.
En este sentido, puntualizando en que la solicitud no pretende contraponerse al comercio que se dedica a la venta de este tipo de productos, las mujeres destacaron: "No buscamos interponernos sobre su trabajo", sino que piden que "en vez de vender elementos pirotécnicos que hagan ruido, se promocionen los que son más lumínicos y no hacen daño".
A su vez, rescataron el alcance benéfico de la campaña más allá de los niños con TEA (Trastorno del Espectro Autista) y comentaron: "Sabemos que la limitación de este tipo de productos ruidosos será muy bien recibida también por los adultos mayores y las mascotas".
Por último, puntualizando en que son "la voz de sus hijos", las santafesinas pidieron que la comunidad tome conciencia de su especial pedido, teniendo en cuenta que sus hijos tienen tanto derecho como todos los niños de disfrutar de las fiestas de fin de año y en Navidad abrir un regalo con alegría.
Ya hay una prohibición municipal
En octubre de este año el Concejo Municipal aprobó una ordenanza a través de la cual se declaró a la ciudad "territorio libre de pirotecnia". La propuesta llegó al recinto luego de dar vueltas por las distintas comisiones desde 2012, pero lo hizo tras lograr el consenso de los actores involucrados y de esta manera cosechó los votos de todos los concejales.
El texto votado textualmente prohíbe "en todo el ámbito del ejido municipal la tenencia, fabricación, manipulación, circulación, transporte, comercialización, depósito y expendio al público mayorista o minorista y uso particular, de todo elemento de pirotecnia o cohetería".
Vale decir que se considera artefacto pirotécnico o de cohetería al destinado fundamentalmente a producir combustión o explosión, efectos visibles mecánicos o audibles, estando incluidos todos aquellos que se enciendan o accionan mediante el uso de mecha, combustión o fricción. Es necesario aclarar también que la aplicación se irá dando en forma progresiva durante dos años.
Hay que aclarar también que la ordenanza aprobada plantea exceptuar de la prohibición a los particulares e instituciones públicas o privadas en tanto la utilización de los elementos prohibidos por la norma lo fuera en el marco de la organización y realización de espectáculos de "fuegos artificiales visuales".
Para sumarse
Los miembros de Déjame Entrar invitan a los interesados a sumarse para apoyar la causa, a compartir su propuesta en redes sociales a través del uso del hastag #MásLucesMenosRuidos.