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Así se pronunció en un diálogo exclusivo con Radio Nihuil Hernán Pérez Orsi. "Les salió el tiro por la culata. Quisieron callar una protesta que se les volvió en contra", dijo el ambientalista rodeado de su familia en un hotel en Rusia.

"Seguiré trabajando por la defensa del ambiente", dijo uno de los activistas argentinos liberados en Rusia

En una comunicación exclusiva con Radio Nihuil, el ambientalista Hernán Pérez Orsi, que fue liberado en Rusia días atrás junto a su compatriota Camila Speziale, dijo: "Seguiré trabajando por la defensa del medio ambiente", al tiempo que aseguró que a los rusos "el tiro les salió por la culata, ya que quisieron callar una protesta que se les volvió muy en contra".

Alojado junto a su familia en un hotel en Rusia, lugar al que accedió luego de que la organización GreenPeace llegara a un acuerdo con Migraciones de ese país, Pérez Orsi se mostró satisfecho y esperanzado en que pronto termine la odisea que le tocó vivir desde que se metió en las aguas del Ártico durante el pasado septiembre para frenar una explotación petrolera, acción que le costó dos meses en una prisión rusa junto a una treintena de ambientalistas.

"Estoy con mi familia, tratando de recuperar el tiempo perdido. Quiero que esto termine lo más rápido posible. Ahora estamos en un hotel, que es el único que determinó Migraciones ya que no tenemos permiso de entrada a la Federación Rusa".

"Tenemos mucho optimismo. Mucha fe, en resolver pronto esto. Queremos que se determine nuestra inocencia y hacemos todo lo posible para que esto sea lo más llevadero. Buscamos ahora distraernos de lo que fueron meses de pesadilla. Mis compañeros están alojados en el mismo hotel y todos están con mucho optimismo", definió.

Hernán aclaró que la mayoría de los activistas que fueron liberados "no pudieron contactarse con su famlia, porque se han puesto trabas políticas, algunos quieren que su familia tenga la visa para entrar"

El ambientalista argentino, lejos de amedrentarse por la experiencia que le tocó vivir, dijo que "voy a seguir trabajando por la defensa del medio ambiente. A los rusos les salió el tiro por la culata, de callar una protesta que se les volvió muy en contra".

"Confío en Dios, en mi país, pero me cuesta confiar en la justicia rusia", concluyó.

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