Sevilla de España, con tres penales convertidos por argentinos, se impuso 4 a 1 por penales a Roma de Italia, tras igualar 1 a 1 los 120 minutos de juego, y se coronó una vez más como campeón de la Europa League.
En el Puskas Arena de Budapest, el cordobés Paulo Dybala abrió el marcador para los italianos, lo empataron los españoles con el gol en contra de Gianluca Mancini y en los penales el conjunto andaluz se impuso 4 a 2 con goles de Lucas Ocampos, Erik Lamela y Gonzalo Montiel, tres de sus cinco argentinos.
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Tal como ocurrió en el Mundial Qatar 2022, la final de la edición 14 de la Europa League la definió Montiel, aunque su remate fue atajado y el árbitro ordenó ejecutarlo de nuevo porque el arquero de la Roma Rui Patricio se adelantó.
El otro héroe fue el arquero Bono, de gran Mundial con Marruecos, quien atajó dos penales.
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Dybala, quien llegó con lo justo desde lo físico, salió remplazado a los 23' del complemento, mientras que en el ganador Ocampos fue el único titular, el Papu Gómez se quedó en el banco del Sevilla y el Huevo Acuña no jugó por haber sido expulsado en la semifinal ante Juventus.
El segundo torneo en importancia de Europa clasificó al campeón para la próxima edición de la Champions League.
Además, Sevilla mantuvo su hegemonía al ganar por séptima vez la Europa League (nunca perdió una final), dos de ellas (2006 y 2007) cuando aún se llamaba Copa de la UEFA y las otras cinco (2014, 2015, 2016, 2020 y 2023) con la denominación actual que rige desde 2009.