El avión que trasladaba al Palmeiras hacia Mendoza no pudo aterrizar en la Aeroestación Francisco Gabrielli, después de que el piloto de la aeronave lo intentara en dos ocasiones. Después de dos intentos que resultaron infructuosos, se decidió cambiar la ruta y desplazarse directamente al aeropuerto de Rosario, distante a 760 kilómentros.
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El viento zonda fue el principal causante de que el avión no pudiera llegar a destino con normalidad.
Según los informes, el episodio causó pánico en los pasajeros, hasta el punto de que algunos miembros de la delegación paulista vomitaron.
Palmeiras tiene que enfrentar a Godoy Cruz el martes que viene, por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores. Se estima que el plantel paulista viaje en las próximas horas, desde Rosario a Mendoza en micro.
El vuelo venía desde Fortaleza, ciudad en la que el Palmeiras había abandonado poco después de que el equipo cayera ante el Ceará por 2-0 por el Brasileirao, en el que aún marcha líder, con tres puntos de ventaja, y un partido más jugado, sobre el Santos.