La Policía no ha descartado la posibilidad de que Tiger perdiera el conocimiento antes de que el coche se saliera de la carretera y volcara. No hay pruebas de que el golfista haya ingerido alcohol, pero no se hizo ningún análisis de sangre que indicara, por ejemplo, si había tomado alguna medicación.
El primer policía que llegó al lugar del accidente dijo en su momento que era un milagro que Tiger estuviera vivo y que el tramo de ruta es conocido por los accidentes debidos al exceso de velocidad. La nueva información sobre las investigaciones fue revelada por el sitio TMZ.
Woods tuvo el accidente dos días después del torneo Genesis Invitational de Riviera, cuando iba de camino a grabar una entrevista para GolfTV y su auto chocó contra la medianera de la ruta, volcó y terminó de costado.
El deportista siempre se mantuvo consciente y nunca perdió el sentido. Quedó con la pierna derecha atrapada dentro del coche, del que tuvo que ser sacado por el parabrisas con la ayuda de una herramienta especializada y un hacha.
El mismo día del accidente, Woods se sometió a una cirugía en el Centro Médico Harbor-UCLA, debido a las múltiples fracturas que sufrió en los huesos de la tibia y el peroné de su pierna derecha.
Las fracturas requirieron que le fuera implantada una varilla de metal en la tibia, mientras que las lesiones adicionales en los huesos del pie y el tobillo requirieron de tornillos y alfileres.