“Desde los 12 años mi mamá me compró sandalias de tacón alto, pues por mi talla, 37,no encontraba calzados bajos para niña que me quedaran”, confesó Rosa Fernández, de 74 años, quien actualmente sufre de ‘juanetes’, desviación del dedo gordo que genera una protuberancia en la parte lateral del hueso. Aunado a esto, el desgaste articular a nivel de la rodilla, causado por el choque constante entre los huesos de la articulación, hace de su caminar una ardua tarea.
El traumatólogo y ortopedista, Luis Palmar, explica que el uso excesivo de zapatos de tacón alto puede ocasionar primeramente problemas en la columna. “Uno de los problemas que trae el uso de este tipo de calzado es que puede causar
malformaciones a nivel de la columna, sobre todo cuando se comienzan a usar desde muy temprana edad, en la niñez y adolescencia prematura”, afirmó a PANORAMA el especialista.
“Nosotros estamos diseñados para caminar sobre suelos blandos y no desde la punta del pie, como obligan a caminar los tacones”, indicó Palmar, asegurando que el tacón no es la forma fisiológica adecuada para caminar, pues “nosotros estamos hechos para el apoyo plantígrado, es decir, para apoyar toda la planta del pie sobre el piso”.
Elevar de forma exagerada el talón del pie, con respecto al arco y la puntera (la punta), además, genera una sobrecarga en las articulaciones de la cadera, en la zona lumbar baja e hiperpresión en la articulación femoropatelar, es decir, a nivel de la rodilla y la rotula, así lo expresó el especialista.
“Si el zapato es muy puntiagudo, pueden generar la presencia de ‘Hallux valgus’, el comúnmente conocido ‘juanete’”, también confirmó el traumatólogo y ortopedista, alertando que el contoneo o vaivén del pie al caminar con zapatos de tacón alto puede generar inestabilidad corporal y dolores articulares en los tobillos a largo plazo.
“La zona donde el tacón genera su mayor daño, es la zona de las vértebras lumbares; estas hacen presión en los nervios ubicados en la zona, provocando dolor e inflamación lumbar”, explicó el especialista Luis Palmar.
Los extremos nunca son recomendables, recuerda el especialista zuliano, indicando que tampoco deben usarse sandalias o calzados muy bajos porque “esto generará hiperpresión a nivel de talón, dando origen a espolones, fascitis plantar (inflamación del talón)”, entre otras afecciones.
Para combatir y revertir los daños articulares causados por el uso continuo de zapatos de tacón alto, el médico especialista en problemas articulares, Luis Palmar, recomienda a las mujeres usar zapatos de tacón corrido, con una elevación
aproximada de 4 centímetros. Asimismo, el calzado debe ser liviano, resistente y a la vez flexible.
“No se debe usar siempre el mismo calzado, el mismo tacón; lo mejor es que usen un día zapatos bajos, otros altos, otros veces zapatos de goma y así, intercalarlos”, agregó el ortopedista.
En caso de padecer una de las afecciones resultantes del abuso de zapatos de tacón alto, es importantísimo mantener una rutina de trabajo físico, como la natación o el trote continuo, explicó Luis Palmar, para mantener en un estado saludable las
articulaciones del cuerpo.
El especialista zuliano exhorta a los marabinos a mantener una alimentación balanceada, rica en proteínas, dado a que “es lo principal para recuperarse ante cualquier patología o padecimiento”.
fuente: lapatilla.com