Los perros son parte de la familia. Pero qué pasa cuando esperas tu primer bebé, seguramente tienes dudas sobre cómo preparar a tu mascota para la llegada del nuevo miembro. En realidad, no hay motivos por los cuales deba dejar de ser parte de la familia y no es un riesgo para tu embarazo. Solo recuerda tomar en cuenta estos consejos para evitar algún inconveniente para cuando llegue el bebé.
Primero, asegúrate que tu mascota no sea agresiva ni tenga problemas de comportamiento con niños. De ser así, mejor busca un terapeuta para corregir su comportamiento. Es normal que, con la llegada del bebé, la atención hacia la mascota sea menor. Esto puede hacer que tu perro haga estragos en la casa pero es solo para llamar tu atención.
Deja que tu mascota participe en la nueva situación familiar, permítele que incorpore al bebé como un miembro más de su familia. Puedes empezar dándole una prenda de tu bebé para que reconozca y se familiarice con el olor, recuerda que los perros utilizan el olfato para crear vínculos.
Cuando el bebé esté un poco más grande, permite que tu mascota lo huela y hasta le dé un par de lamidas, de esta manera asocian mejor el olor. ¡No te estreses ni te pongas nerviosa! Tu mascota lo sentirá y puedes crear una situación desfavorable.
Sin importar que tu perro no sea agresivo y que ya haya tenido contacto con el bebé, no los dejes solos. Puede ser que tu mascota se acerque al pequeño con buenas intenciones pero el bebé aún no tiene conciencia sobre el otro ser vivo por lo que puede asustar o amenazar a tu mascota provocando una reacción violenta por instinto.
Sobre todo, no abandones a tu mascota. Es cierto que un bebé demanda mucho tiempo pero procura hacer tiempo para jugar con tu mascota y darle muestras de cariño. Recuerda que también es parte de la familia y seguramente está igual de feliz y emocionado por el nuevo miembro.