"La música me importa demasiado y tal vez era eso lo que me alejaba", dice Gloria Carrá, de 44 años, sobre la década que pasó componiendo en secreto con guitarra y ukelele, en paralelo a su carrera como actriz, su profesión desde los 7. "Hacía canciones porque no lo podía evitar. Siempre tuve el deseo de mostrarlas, pero también sentía mucha timidez. En un momento me lo tuve que plantear: '¿Qué hago con todo esto?'."
La respuesta fue Coronados de Gloria, la ajustada banda de gypsy-folk que armó con Jano Seitún, alias Alvy Singer, el percusionista "Colo" Belmonte, el guitarrista Pedro Jozami, el vientista Christian Terán y el bajista Lisandro Etala.
Sagrado, el disco debut que salió en 2015 y tocaron en marzo en Niceto Club, tiene aires flamencos, de canción francesa y, como le suelen señalar, puntos en común con Kusturica. "Todo eso me encanta, pero no buscamos sonar así", explica. Después de escucharlos en la boda del dramaturgo Javier Daulte, Daniel Grinbank se ofreció como manager. "Nos dijo cosas hermosas en un mensaje re largo", recuerda ella, "me da vergüenza contarlo".
Este año, Gloria actuará en el unitario Silencio en familia, pero sabe dónde está su pasión: "Hoy esto de no tener una máscara puesta es lo que me atrapa mucho más que el teatro. Le estoy encontrando el gusto a ser yo misma arriba del escenario."
