La investigación, la primera que analiza el impacto del sueño en la longevidad, estudió a unaamplia población de más de 15.600 personas mayores de 65 años, incluidos 2.800 mayores de 100 años. Más de 65% de los participantes informaron que su calidad de sueño era "buena" o "muy buena"con un promedio de 7,5 horas de sueño diarias. Y entre los ancianos de 100 años o más, esta cifra aumentó a 70%, afirma el estudio publicadoen la revista Sleep. Tal como explican los científicos de la Universidad Estatal de Portland, Oregon, EstadosUnidos, quienes llevaron a cabo el estudio, China -con 1.300 millones de habitantes- cuenta con lamayor población de ancianos del mundo, por eso el país era "un recurso ideal" para estudiar losfactores de una longevidad sana. Según cálculos del Banco Mundial en China viven cerca de 40,5 millones de personas de 75 añoso más.
Buena salud En el estudio los científicos pidieron a los participantes que respondieron a un cuestionariosobre la calidad y duración de su sueño, incluidas las siestas tomadas durante el día. Después se compararon esos datos con los registros sociodemográficos y de salud de losparticipantes. Los resultados mostraron un vínculo entre la peor calidad de sueño y los problemas de salud. Se encontró que los participantes que dijeron tener mala salud mostraron 46% menosprobabilidades de dormir bien. También hubo una baja proporción en las probabilidades de tener una buena calidad de sueñoentre las personas que a menudo se sentían ansiosas, que tenían una enfermedad crónica o que teníanproblemas para desempeñar las tareas diarias. "La edad y las condiciones de la salud son los dos factores más importantes asociados con la buena calidad y duración del sueño" afirma el doctor Danan Gu, quien dirigió el estudio.
Cuestión de género Los científicos descubrieron que el acceso a los servicios de salud y el estatus económicoestaban fuertemente vinculados a una buena calidad de sueño. Se encontró que los participantes que tenían un servicio médico adecuado mostraron 84% másprobabilidades de dormir bien. "La mayoría de los ancianos sanos experimentan una calidad de sueño satisfactoria" dice el doctor Danan Gu. "Los problemas de sueño en las edades más avanzadas suelen surgir por una variedad de factores fisiológicos y psicosociales, más que por la edad en sí misma" agrega. El género también parece influir: los hombres mostraron 23% más probabilidad de dormir mejorque las mujeres.