La producción en laboratorios de carne sin necesidad de matar animales se aleja de la cienciaficción y podría poner, en menos de diez años, una hamburguesa verde sobre el plato. Esta carne se elabora a partir del cultivo en el laboratorio de células madre o de músculo deanimales como pollos, cerdos o corderos. La alternativa fue considerada como uno de los 50 inventosdel año, según la revista Time, en 2009 y sería hasta más sana y menos contaminante y tendría lasmismas proteínas que la carne normal, según sus defensores. Existe a nivel global una organización que reúne los esfuerzos de todos los científicos delmundo en este campo. Se llama New Harvest y su director, Jason Matheny, indicó que se pueden hacer " hasta hamburguesas que prevengan los ataques al corazón". Esto indica que se podría inclusocontrolar la producción para evitar enfermedades como el mal de la vaca loca o la gripe A.Inclusive, se puede obtener carne light. "La mayor parte de lo que comemos viene del laboratorio, todo está procesado", indicó Matheny, para convencer a los que desconfían de una comida alejada de los campos y elaborada conganaderos de bata blanca. Sobre la posibilidad de que estas prácticas experimentales puedan tener efectos inesperadospara la salud humana, el especialista respondió: "No somos conscientes de ningún riesgo". La fórmula secreta está en un compuesto de nutrientes procedentes de sangre animal ymicroorganismos, donde se coloca una célula que podría teóricamente alimentar a toda la poblaciónmundial por un año. Por el momento, el resultado son sólo unas pequeñas tiras de carne de cerdo de un centímetrode largo, pero Según Metheny, si la tecnología continúa avanzando, en cinco o de cinco a diez añosesas tiras "podrían producir sustitutivos de carne a gran escala con dureza suficiente como parahincarle el diente y confundir su sabor con el tradicional", indicó. En Estados Unidos, la NASA entró en el camino de esta investigación en 2001 para mejorar ladieta de los astronautas, pero los altos costos del desarrollo interrumpieron su avance y desdeentonces, el gobierno holandés es el que más ha invertido en esta carrera y le siguen centros deinvestigación en Estados Unidos, Japón, Australia y en los países escandinavos. La idea una carne que no cueste vidas de los animales es una aspiración que va más allá delas reivindicaciones de los defensores de la naturaleza y podría ser una solución a lainsostenibilidad de un planeta con un ganado que devasta el Amazonas y aumenta el calentamientoglobal, como alertó el informe de Naciones Unidas La Larga Sombra del Ganado.