¿Reinas sí o no? ¿El debate se reduce sólo a eso? ¿Los valores de una tradición reflejan los de un estereotipo que hay que dejar de lado? ¿Las mujeres son expuestas y cosificadas? ¿Se busca sólo una cara bonita? ¿Es un concurso de belleza? ¿Hay que modernizar y cambiar la elección? ¿Qué esperamos los mendocinos de la Reina Nacional de la Vendimia?
El debate sobre la elección de la Reina llegó desde adentro cuando la celebración está llegando a su punto de ebullición y nada de lo que sucede alrededor de Vendimia es intrascendente en Mendoza.
Fue la voz de una participante, de una mujer que transitó todo el camino vendimial y que llegó a ser Virreina la que puso las cartas sobre la mesa. Julieta Navarro escribió en sus redes que hay algo en toda la Fiesta que "desentona, una parte que le sobra", con referencia a la coronación de las soberanas y el concurso vendimial. Una Reina de mandato cumplido, Sofía Haudet, le contestó y el eco creció como las ondas de una piedra que cae en un estanque.
Voces a favor y en contra. Puntos medios. Posturas inflexibles. El juego está abierto y hay opiniones para todos los gustos. "Creo que la polémica se viene gestando por cambios de la sociedad en general. Si vamos a hablar históricamente estamos en la posmodernidad y nos oponemos a cosas y a preceptos de la modernidad, y la Fiesta nace en la era de la modernidad", explicó con claridad Dana Otero, Reina Nacional de la Vendimia 2004.
Desde 1936, cuando fue electa Delia Larrive Escudero como la primera soberana hasta Victoria Colovatti, la reina que entregará la corona la noche del 3 de marzo, no sólo hubo cambios en la Fiesta, hubo cambios en toda la sociedad que repercuten inevitablemente en la tradición.
Unos de los últimos grandes pasos a favor de la modernización de la elección fueron los cambios en el reglamento. Se dejaron de lados requisitos propios de concursos de belleza como la altura o límites de edad y se amplió el abanico a cualquier mendocina. Se cambió, además, la forma de votación y se le dio la posibilidad al público que asiste al Acto Central de "elegir su reina".
El planteo tiene aristas históricas, sociales, culturales e incluso hasta económicas, pero el eje principal está en la mujer. En una mujer que se encuentra en plena lucha por la conquista de cada vez más derechos y más igualdad.