En menos de 15 días la policía recibió tres denuncias por agresiones y las últimas dos se produjeron el miércoles de esta semana. Las adolescentes –una de 11 y otra de 19 años– fueron atacadas en la calle por banditas integradas también por mujeres que no superan los 15 años, según los testimonios de las propias víctimas. “Si tenemos en cuenta que a una de las adolescentes le tiraron un ladrillo por la cabeza, no es algo para pasarlo por alto”, comentó a Diario UNO el subcomisario Hugo Alcalde, de la Comisaría 14 de Alvear. Para calmar las aguas y prevenir un posible desenlace fatal –nadie quiere entre manos un caso Naira Cofreces (17), quien murió por la golpiza que le propinaron sus compañeras, en Junín, provincia de Buenos Aires– desde la policía propusieron una serie de reuniones con los directores de las escuelas para armar una estrategia de trabajo en conjunto. “Los ataques no se dan dentro de los establecimientos pero es muy valioso el aporte de los docentes para identificar los focos conflictivos”, dijo el subcomisario. La intención es acentuar la presencia de los efectivos en los establecimientos con charlas preventivas, entre otras acciones, y dentro de ese proceso tratar de involucrar a los padres. “Hay que llegar a los jóvenes para tratar de hacerles entender que esas acciones pueden acarrear serias consecuencias. Una agresión no es un chiste ni un momento jocoso sino que puede ser muy grave, para la víctima y también para ellos”, agregó Alcalde.
Tres ataques en mayo En la mañana del miércoles dos menores en bicicleta interceptaron a una nena de 11 años que caminaba por avenida Alvear Oeste y le pegaron, vaya a saber por qué que causa. Pasadas las 22, cuatro amigas desaforadas atacaron a una estudiante de 19 años cuyo único crimen fue volver a casa temprano porque esa noche no hubo clases en el CENS que funciona en las instalaciones de la escuela Capital Federal (calles Roque Sáenz Peña y Roca). Las jovencitas, no mayores de 15 años, le pegaron y hasta le tiraron un ladrillo por la cabeza. El hecho más grave y que inició esta seguidilla de ataques ocurrió el viernes 9. Florencia (16) terminó con el rostro lleno de moretones porque “se hacía la linda”, según le recriminaron las agresoras, una de ellas ex compañera de la escuela.