pelea por la derogación del decreto N°699 de promoción industrial. Con la ausencia delvicepresidente Julio Cobos, una de las pocas voces disonantes fue la de un bodeguero riojano que,al mismo tiempo que calificó de "mamarracho" el decreto, aseguró que el gobernador Celso Jaque "sesacó la lotería para dejar de hacer la plancha y levantar su imagen". Hace apenas un año, el mandatario mendocino recibió una lluvia de críticas en este mismoevento. Ayer, el clima fue muy diferente: viñateros y bodegueros del Este reconocieron un cambio derumbo en la política del Gobierno y referenciaron muy especialmente la gestión de Raúl Mercau comoministro de Producción. Más allá de la indudable fluidez en la relación entre Estado y sector privado que logróMercau, la exitosa cosecha 2010 jugó a favor de Jaque. Ayer, Javier Palau, presidente del Centro de Viñateros y Bodegueros del Este, no pudo niquiso ocultar su satisfacción. "Calidad, cantidad y buenos precios han definido la cosecha 2010",dijo. Y dio números: 9.800.000 quintales de recolección de uva, 635.000.000 de litros de vino,142.000.000 de litros de mosto. Esto representa el 55% de las uvas y el vino, y el 80% del volumende mosto de Mendoza. Además, "la expectativa de una cosecha superior más una reducción del stock vínico provocaronuna tonificación general de los precios que se reflejaron en el mercado", dijo Palau. "No vamos a pasar revista de los pormenores de nuestra relación con la actual administración en donde funcionarios junto a privados generaron condiciones de desencuentros que mellaron eldiálogo y el trabajo en conjunto. Pero lo consideramos superado y queremos destacar que, así comoel año pasado reclamábamos por la falta de un interlocutor válido en el área de economía, hoy ledecimos al señor gobernador que ese interlocutor lo hemos encontrado en el equipo del ministerio deProducción liderado por Raúl Mercau", subrayó Palau. El presidente del centro reconoció: "Nuestras exportaciones de vinos fraccionados en elprimer cuatrimestre de este año han registrado un aumento del 11%". Aunque alertó: "Los reclamos deEuropa y Brasil poniéndoles freno a las importaciones desde Argentina nos preocupan". En cambio, para los bodegueros y viñateros, el presente del mercado interno genera un llamadode atención. "En el primer cuatrimestre, las ventas cayeron un 6%. Esto afirma la tendencia de losúltimos años a la continua pérdida de mercado y nos obliga hacer cambios rotundos en la política decomunicación", dijo Palau. Entre los pocos llamados de atención que realizó el sector vitivinícola de la zona Este,estuvo el referido al crecimiento del gasto público. "Recientemente tomamos conocimiento de unestudio que da cuenta de cómo ha crecido el empleo público en los distintos municipios de laprovincia. No vamos a abrir juicio sobre ello; lo que sí decimos es que, en la medida en que lasempresas no sean competitivas, el Estado cada día crecerá más y más al asumir la obligación decontener la demanda laboral y para financiar esta política deberá seguir apelando a más impuestos omendigar más coparticipación federal", opinó en su discurso el presidente de la entidad.