Como parte de la política de establecer microhogares para los chicos huérfanos o cuyas familias no pueden cuidarlos, este jueves quedó abierta la residencia para niños que tienen hasta 11 meses.
La casa ubicada en pleno centro de Mendoza, en calle 9 de Julio, tiene capacidad para albergar a 16 pequeños, pero actualmente tiene sólo a 7 bebés, de los cuales 5 ya están en estado de adoptabilidad pero la Justicia de familia demora el trámite, aun cuando ya se ha determinado desde la DINAF que no podrán ser revinculados con sus familiares de sangre.
En este sentido, el gobernador Alfredo Cornejo adelantó que están trabajando en una acordada de la Suprema Corte de Justicia, cuyo autor es el supremo Julio Gómez.
Se ha enviado una nota explicativa, donde el Gobierno a través de los técnicos del área de Niñez han expresado su parecer, con el objetivo de que se cumplan los 180 días de plazo que indica la ley para el caso de los niños que ya tienen su estado de adoptabilidad, es decir que ya se ha revisado su relación con la familia nuclear y extensiva, y no podrán ser revinculados.
Pero lo cierto es que la Justicia se toma mucho más tiempo. Según el gobernador, " hay mucha voluntad política de la Corte y mucha voluntad política del Gobierno, pero ahora falta que los jueces la pongan en práctica".
En este momento, están bajo cuidado de la Casa Cuna 46 pequeños de 0 a 4 años, y en este grupo hay 11 chicos listos para ser adoptados, incluyendo a los 5 bebés de hasta 11 meses que viven en la flamante casa inaugurada, pero aún su trámite de adopción no ha concluido.
Los otros 35 están esperando a familias temporarias para vivir en un hogar, como cualquier otro niño, con amigos, vecinos, compañeros de jardín, etcétera.
Es por esto, que el propio Cornejo solicitó a los mendocinos que se involucren más en este programa (familias cuidadoras), para estar más cerca de estos pequeños.
