El quinto avión antigranizo costó 2 millones de dólares

Por UNO

Después de pagar poco más de 2 millones de dólares, unos 76 millones de pesos argentinos, el Gobierno de Mendoza espera que, a fines de este año o principios del que viene, se sume el quinto avión de la lucha antigranizo, un jet que combatirá especialmente las tormentas en el Valle de Uco y que posee las características como para hacerlo desde la altura suficiente y evitar los riesgos que en 2005 provocaron que se estrellara un Cessna 340 en Pareditas y murieran el piloto y el copiloto.

"Este será un año mucho más difícil que el año pasado", advirtió sobre el granizo Alfredo Aciar, jefe de gabinete del Ministerio de Economía, Infraestructura y Energía y que está a cargo de la Dirección de Agricultura y Contingencias Climáticas después de la renuncia de Pablo Stallocca.

El fenómeno de El Niño genera este presagio a pesar de que será la primera temporada después de casi una década en que los cuatro aviones Piper Cheyenne II están trabajando a pleno desde el comienzo y que se espera que en la segunda parte de la campaña ya esté operando el Learjet 31 A, la nueva aeronave que se incorpora a la flota.

El jet, que fue comprado a División Turbo SRL por U$ 2.100.000, está ahora siendo adaptado para la lucha: se le están colocando las cartucheras y haciendo una revisión general que son certificadas por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC). El pliego también contemplaba que la empresa capacite a los pilotos que vayan a volarlo.

El plan es que este avión trabaje en el Valle de Uco, que no tiene lucha aérea desde el accidente ocurrido el 7 de febrero de 2005. Sin embargo Aciar dijo que a la actividad en esa zona de Mendoza tiene "una relativa dimensión" ya que "es la zona con menor riesgo de granizo de toda la provincia. Nuestras estadísticas indican que el Valle de Uco pierde anualmente entre el 2% y 3% de su producción por granizo, una pérdida casi marginal comparativamente con el Sur de Mendoza, en donde se pierde un promedio del 20 %".

El funcionario acotó que, además, los productores tienen el seguro agrícola "que es la zona en donde menos adherentes hay debido al bajo riesgo" y también está "la red de generadores de superficie, que hacen lo mismo que un avión y es igual de efectiva". Aún así, cuando el Learjet comience a operar al este del meridiano 69, "el Valle de Uco tendrá la mejor cobertura antigranizo de toda la provincia", dijo Aciar.

El LV-BFG Learjet 31 A, fue fabricado en 1992 y la provincia de Mendoza será su sexto dueño. Si el Gobierno hubiera querido uno nuevo, tendría que haber pagado unos 25 millones de dólares.

La máquina fue comprada en el '92 por una empresa norteamericana de donas, después fue adquirida por General Electric, luego fue de un banco y posteriomente de una aseguradora, todas compañías norteamericanas.

Su último propietario fue Frente de Onda SA una compañía de vuelos privados. La aeronave está radicada en Argentina y tuvo su base en El Plumerillo. El hecho de que ya haya estado en Argentina fue un elemento determinante para que Mendoza decidiera comprar el Learjet a División Turbo SRL, ganador de la licitación, ya que se ahorraron así los costos de importación. Las otras ofertas fueron las de Fargo Jet Center USA, con un Lear Jet 35 A modelo 1979 (U$S1.570.000) y Haggan Aviation USA con un Lear Jet 35 A 1987 (U$S1.664.000). Los principales elementos que inclinaron la balanza a favor a Turbo es que es un avión sensiblemente más moderno y sin costos de importación.

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