El incidente del mercurio detectado en abril fue sólo una muestra de otros sucesos similares, según las conclusiones de un estudio de la UNCuyo.

Echaron desechos contaminantes en ríos y canales de Mendoza sin que organismos oficiales lo percibieran

Por UNO

El incidente que provocó el caos en la provisión de agua potable en el Gran Mendoza el 16 de abrilfue sólo una muestra de una cadena de sucesos similares que contribuyen a contaminar el líquido de

los cauces que luego es potabilizado para el consumo. Una de las conclusiones del estudio de la

UNCuyo que detectó mercurio en el organismo de personas como consecuencia del consumo de agua es

que periódicamente se vierten desechos contaminantes en ríos y canales sin que sean percibidos por

métodos utilizados por los organismos oficiales.

El trabajo de investigación liderado por el doctor Alfredo Castro Vázquez se basó en la

primera fase en el estudio de una especie de caracoles que actuaron como bioindicadores de

contaminación. A diferencia de los métodos de detección usados por Obras Sanitarias y el

Departamento General de Irrigación (organismo con poder de policía sobre el agua), que miden el

nivel de contaminación en un momento específico, los caracoles acumulan en su organismo los metales

ingeridos junto con el agua generando una especie de memoria capaz de almacenar en el tiempo, por

ejemplo el mercurio.

"Los valores de mercurio en sangre detectados no son alarmantes pero sí nos indican la

necesidad de legislar, porque nos están diciendo que algo de mercurio está entrando a la red de

agua potable", aseguró Castro Vázquez.

Al mismo tiempo recordó que no hay un nivel normal de este metal en la sangre, puesto que "lo

normal debería ser 0% de mercurio. Pero como estamos expuesto a la contaminación se habla de

valores tolerables".

En una muestra de 15 consumidores habituales de agua en la Facultad de Medicina "se

detectaron valores cercanos hacia arriba y hacia abajo del límite tolerable de mercurio en seis

personas", esgrimió con preocupación el científico. Uno de los motivos de la inquietud es claro: le

restó posibilidades a la contaminación natural del agua producto de "alguna veta de mercurio de la

montaña arrastrada por el agua", mientras centró la explicación de la existencia del peligroso

metal como efecto de la acción intencionada de productores de desechos tóxicos que usan los cauces

para sacárselos de encima.

Los investigadores involucrados en el estudio que reveló en exclusiva Diario UNO el viernes

no quieren entrar en discusiones políticas, aunque esperan que desde el Gobierno y la Legislatura

se activen iniciativas para atacar el flagelo. Una de las líneas propuestas, que fue difundida ayer

por este diario, apunta a producir un diagnóstico preciso de la situación general realizando un

estudio similar al de la UNCuyo pero sobre una muestra de consumidores mucho más amplia.

La otra recomendación es que se legisle para controlar mejor a los responsables de la

contaminación de los cauces, bajo la sospecha de que el río Mendoza y sus derivados son receptores

de metales nocivos antes de proveer a las plantas potabilizadoras que surten a la población del

Gran Mendoza. Los autores del trabajo descreen de que Keghart, la empresa sindicada por el gobierno

como autora del vertido que en abril contaminó la provisión de las potabilizadoras Alto Godoy y

Benegas, ambas ubicadas en el parque General San Martín, sea la única culpable de desmejorar la

calidad del agua que terminan consumiendo los pobladores de la ciudad y los alrededores. La causa

penal contra Keghart fue archivada por la Justicia por falta de pruebas, pero la planta fue cerrada

por Ambiente.

Aunque no arriesgaron nombres de los posibles culpables, los autores del estudio de Medicina

apuntaron a varios responsables basados en el análisis de los resultados de la investigación que

desarrollaron durante los últimos cinco años. Cuando empezaron el trabajo ni se imaginaban que un

día de abril de 2010 la contaminación del agua con mercurio iba a sembrar pánico en la población al

mismo tiempo que generaba una crisis política en el gabinete del Gobierno.