Este hombre era el que amenazaba con un arma de fuego a Chabert y Zalazar, pero el arma no fue hallada luego del hallanamiento que ordenó la fiscalía de Delitos Complejos, a cargo de Claudia Ríos, que interviene en la causa. Igualmente, pese a que en un principio se dijo que había disparado a la cámara, el aparato no muestra señal alguna de eso.
Por su parte, a Antonio Isgró le imputaron "robo agravado" como coautor de su padre en la apropiación de los teléfonos.Para estos delitos se prevén penas de 5 a 15 años de cárcel, que no son excarcelables. Sin embargo, si los abogados de los Isgró logran demostrar a la Fiscalía que los imputados se someterán voluntariamente al proceso judicial, les darían la libertad por que se priviligia el "principio de inocencia".
En cuanto a las amenazas y la violencia física -según los periodistas fueron golpeados con una barreta de hierro por Antonio Isgró-, estos delitos quedaron subsumidos dentro de la imputación del robo agravado.