Uno de los abogados que defenderá al empresario patagónico Lázaro Báez, Rafael Sal Lari, es un controversial ex juez que enfrentó numerosos juicios en su contra por su supuesta laxitud a la hora de excarcelar detenidos que luego volvieron a delinquir.
Durante su carrera como magistrado, Sal Lari acumuló denuncias y pedidos de destitución por parte de familiares y víctimas de inseguridad, así como del intendente de San Isidro, Gustavo Posse, quien finalmente en 2012 desistió continuar con la acusación.
Uno de los casos más polémicos ocurrió en 2008, cuando dispuso la excarcelación de un delincuente que cuatro meses después fue partícipe de un robo en un domicilio particular que terminó con el asesinato del ingeniero Carlos Regis delante de su familia.