Estados Unidos con bajas en la expectativa de vida.png
El Informe de la BAHI (Bloomberg American Health Initiative) es una iniciativa que aborda 5 ejes de investigación principales sobre la salud del país: las adicciones y las sobredosis, la salud de los adolescentes, los desafíos ambientales, los sistemas alimentarios para la salud y la violencia. El análisis de resultados obtenidos reveló que hay una brecha cada vez mayor entre la esperanza de vida de Estados Unidos en comparación con el Reino Unido.
La investigación arroja los siguientes números: la expectativa de vida actual es de 78 años en Estados Unidos comparada con la de otros países de ingresos similares. Reino Unido mostró un número más esperanzador: una esperanza de vida de 81 años. Teniendo en cuenta que comparten características similares económicas y demográficas, la diferencia se debe en gran parte a cuestiones de estilos de vida y políticas diferenciadas en cada país con respecto a la salud, seguridad, bienestar y violencia.
Causas: qué está generando la disminución en la esperanza de vida de los estadounidenses
Si bien el país forma parte del grupo de países con mayor nivel de ingresos son otros los factores que impactan directamente. Entre las causas principales que están afectando la calidad de vida y disminuyendo la expectativa de años para sus ciudadanos destacan las siguientes. Siendo estos motivos evitables y controlables.
- Enfermedades cardiovasculares
- Sedentarismo
- Muerte por sobredosis
- Cáncer
- Accidentes automovilísticos
- Homicidios y suicidios relacionados con armas de fuego
- Adicciones a sustancias como el alcohol
Estadounidenses podrían mejorar su expectativa de vida.png
En palabras de Dr. Joshua M. Sharfstein, director de BAHI, ''lo más alarmante es que, as tasas de homicidio y suicidio relacionados con armas de fuego son 485,9 veces más altas para las personas menores de 25 años en los EE. UU. en comparación con el Reino Unido (RU) y las tasas de sobredosis de drogas son 4,5 veces más altas en los EE. UU. para las personas menores de 25 años”. Estos resultados deben utilizarse para aplicar soluciones factibles y políticas de salud publica. Utilizar datos concretos para aplicar medidas en conjunto con la población puede ayudar a aumentar la expectativa de vida de los estadounidenses.