Pese a que se volvió a restaurar en el año 1950, este pueblo fantasma nunca pudo ser civilizado nuevamente
Dentro de lo que es el turismo, uno de los países más fuertes es Estados Unidos
Dentro de lo que es el turismo, uno de los países más fuertes es Estados Unidos. Sus monumentos históricos, ciudades icónicas y bellos pueblos hacen que sea entre los más visitados del globo.
Sin embargo, pese a toda su belleza, también existe un pueblo que es conocido por su tenebrosidad, en donde los ciudadanos que lo visitan gastan sus energías y tiempos en la localización de fantasmas.
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Calico es un pueblo ubicado al sur de California, Estados Unidos, que fue fundado en el año 1881 por una serie de mineros quienes prácticamente descubrieron la zona.
Tal fue el auge de turismo en este novedoso pueblo, que Calico alcanzó a albergar a más de 3.000 personas entre hoteleros, mineros, comisarios y alumnos de escuela, entre otros.
Sorprendentemente, la debacle de este pueblo llegó unos años después, en 1886, cuando el mineral de plata fue perdiendo valor en el mercado. A partir de 1890, ya era considerada como una ciudad fantasma.
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Pese a que se volvió a restaurar en el año 1950, este pueblo nunca pudo ser civilizado nuevamente. En la actualidad, es catalogado como uno de los lugares más tenebrosos de Estados Unidos.
Una de las fechas en donde Calico vuelve a ser visitado por miles de personas es el 31 de octubre, en Hallowen, donde los ciudadanos regresan con un sólo objetivo: cazar fantasmas en el pueblo.
Más allá de ser considerado un pueblo fantasma, Calico también es reconocido por ser la locación de múltiples películas de cowboys o la realización de videoclips de diferentes cantantes y bandas.
Entre las grandes producciones de este pueblo, se destacan: