Janis Joplin: un potente grito femenino desde las entrañas en pleno "verano del amor"

Por UNO

Hace 75 años, nacía en Texas Janis Joplin, la dueña de una potente voz surgida desde las entrañas, que simbolizó la liberación femenina en el denominado "verano del amor", en el corazón de la década del '60, y que, a pesar de su corta vida, por su prematura muerte, se estableció como emblema del rock y el blues. Con apenas tres discos editados y un álbum póstumo, su fulgurante trayectoria marcó el pulso de la era vivida entre 1967 y 1970, con epicentro en la ciudad de San Francisco, en donde la juventud y su estilo de vida, ligado al hippismo, pareció dictar sus normas al resto del mundo. En ese contexto, esta mujer se impuso a partir de una inigualable voz, plagada de sentimiento, capaz de expresar el dolor y el deseo en carne viva, como una prueba cabal de su propia existencia, en donde la discriminación y la soledad eran disimuladas por la devoción pública. "Cuando canto es como si le hiciera el amor a 25.000 personas, pero luego me voy a mi casa y estoy sola", lamentó alguna vez Janis Joplin, quien ocultaba sus demonios internos con un hedonista estilo de vida, que incluía alcohol, drogas y una desenfrenada vida sexual. Su interpretación de clásicos como "Cry baby" y "Me and Bobby McGee", o sus memorables performances en los famosos festivales de Monterrey, en 1967; y Woodstock, en 1969, son algunas de las pruebas de su inconmensurable talento como artista. Justamente, la capacidad de cristalizar sus sentimientos en su canto y el modo en que la artista se mostraba públicamente se transformaron en un símbolo para un movimiento de liberación femenina que empezaba a ganar terreno en los convulsionados años '60. Fue tal el protagonismo de Janis en el llamado "verano del amor", que su prematura muerte, en 1970, por una sobredosis de heroína, fue uno de los hitos que marcaron el final de esa era, junto con la también desaparición física de Jimi Hendrix, Jim Morrison y Brian Jones, el cuarteto que dio origen al famoso "club de los 27", por la coincidencia en las edades que tenían al fallecer. Nacida el 19 de enero de 1943, en Port Arthur, Texas, Janis atravesó una dura infancia y adolescencia debido a la discriminación sufrida por parte de sus compañeros de colegio, a raíz de su robusto físico y los aparatos que debía usar en sus dientes, razón por la cual comenzó a encontrar en el blues un buen refugio. El dolor expresado en sus canciones por Billie Holiday, Big Mama Thornton y Odetta, entre otras, resultaron una inspiración para la joven que comenzó a vislumbrar una vía de escape en la música. Janis comenzó a forjar su destino cuando en 1963 se mudó a San Francisco, un ambiente mucho más propicio no sólo para sus aspiraciones musicales, sino para alejarse del limitado estilo que vida que ofrecía su pueblo natal. En esa ciudad trabó relaciones con diversos músicos, que luego se repartirían en famosas bandas de la época como Jefferson Airplane, The Grateful Dead y Big Brother and The Holding Company, en la que se desempeñaría como cantante. Junto a ese grupo es que Janis alcanza la fama y destaca en el ambiente musical por sus cualidades como intérprete, algo que cristalizó en el homónimo disco debut del grupo y en su segundo registro "Cheap Thrills", así con en los consagratorios Festivales de Monterrey y Woodstock. El éxito artístico de la cantante la catapultó como un símbolo del movimiento feminista que veía en ella una figura mucho más representativa dentro de la música que las condescendientes protagonistas de los llamados "girls groups", los abnegados espíritus torturados de las figuras del jazz y el blues, o la polítizada y, para esa altura, casi obsoleta Joan Baez. Ocurre que el modo de vida de Janis, con su consumo de drogas duras y alcohol, y sus abiertas relaciones sexuales, tanto con hombres como con mujeres, mostraban una liberación poco habitual para una figura pública. En tanto, la consagración artística de Janis la alejaba de a poco de su banda, y a instancias del histórico manager de Bob Dylan, Albert Grossman, emprendió su siguiente grabación de manera solista, acompañada por un grupo bautizado como Kosmic Blues Band. Aunque estos pasos parecían convertirla en una estrella que no paraba de crecer, la realidad marcaba que Janis se sentía cada vez más aislada, algo que minaba su crónica baja autoestima, y la empujaba a incrementar su consumo de heroína y sus casuales encuentros sociales. En ese contexto, al frente de una nueva banda llamada Full Tilt Boogie, encaró la grabación de "Pearl", su cuarto disco, que contenía sus clásicos "Cry baby" y "Me and Bobby McGee", la cual no pudo concluir debido a su muerte. Su ausencia al estudio en la sesión del 4 de octubre de 1970 llamó la atención de sus colaboradores, quienes la hallaron muerta al lado de su cama, por una sobredosis de heroína, cuando la fueron a buscar. Finalmente, el disco fue editado de manera póstuma e incluyó una versión instrumental de "Buried alive in the blues", cuya voz no llegó a grabar, y un registro a capella de "Mercedes Benz", en la que puede apreciarse su gran talento vocal. Tal como ocurre en estos casos, los años siguientes fueron testigos de una andanada de publicaciones piratas, grabaciones encontradas y álbumes compilatorios lanzados al mercado para explotar su figura. También existen una gran cantidad de documentales y hasta una famosa película biográfica, la exitosa "La Rosa", de 1979, con una actuación consagratoria de Bette Middler. Lo cierto es que la muerte de Janis puso fin a toda una era y dio origen a un mito que creció con los años, acaso alimentado por una voz que sigue conmoviendo por más conocida que resulte a esta altura.