Estamos atravesando una época donde nos vemos bombardeados por cientos de productos de belleza, y en muchas ocasiones no sabemos para qué sirven y en qué se diferencian.
Estamos atravesando una época donde nos vemos bombardeados por cientos de productos de belleza, y en muchas ocasiones no sabemos para qué sirven y en qué se diferencian.
Por ejemplo, en el caso de los sérums, los mismos vienen de diversos colores, texturas y hasta ingredientes. En la siguiente nota nos enfocaremos en explicarte para qué sirven la niacinamida, la vitamina C, el protinol y el ácido hialurónico.
Según The Chemist Look Argentina, la niacinamida es una de las formas de vitamina B3. Es un activo multifuncional que actúa en la piel a través de diversos mecanismos, logrando una mejora visible en la textura y el aspecto global de la piel.
La vitamina C es un nutriente esencial para el cuerpo humano, actuando como antioxidante y siendo vital para el crecimiento, desarrollo y reparación de tejidos.
El protinol es un ingrediente antiedad exclusivo de la marca Avon, y se trata de un aminoácido modificado que estimula la producción de colágeno en la piel, específicamente colágeno tipo III. El mismo ayuda a restaurar la pérdida de colágeno y a mejorar la firmeza, suavidad y luminosidad de la piel.
El ácido hialurónico es un componente que sirve para hidratar profundamente y mejorar la apariencia de la piel, reduciendo la aparición de arrugas y líneas finas.
No existe una edad específica en la cual se aconseja usar sérums, pero lo mejor es hacerlo a partir de los 20 años, ya que el momento en el cual la piel comienza a mostrar signos de envejecimiento, aunque sean sutiles.
Entre los 20 y los 30 años hay que usar productos con vitamina C y ácido hialurónico; entre los 30 y los 40 años vitamina C, y de los 40 años en adelante se pueden usar sérums con retinol para promover la producción de colágeno.
*Diario UNO no mantiene ninguna relación comercial con las marcas mencionadas en la nota.