Un descubrimiento que sorprende
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Las pirámides siguen sorprendiendo a los mexicanos.
El grupo de expertos indica que por el paisaje se puede determinar que la pirámide buscaba destacar el solsticio de verano. Como publicó el Instituto Nacional de Antropología e Historia, durante este día, desde la Pirámide de la Luna el Sol levanta al amanecer sobre el volcán Xihuingo, mientras para el ocaso se oculta detrás del cerro Maninal, al oeste.
La ubicación dentro de Teotihuacan también marcan la importancia de esta edificación. "El volumen de la Pirámide de la Luna establecía una relación proporcional con la delimitación perimetral del espacio. Esta frontalidad contenía las visuales como un eje longitudinal que remataba visualmente con las fachadas de los demás edificios”, explicó Montero García.
El modelo toma como relevantes los vértices y las desviaciones que salen del eje de simetría de los edificios. Así, intenta encontrarle una lógica a la traza de esta antigua ciudad, completamente ligada al calendario astronómico.
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Así se ve el paisaje que desencadenó el descubrimiento.
Montero García comentó sobre la alineación de la Pirámide de la Luna: "Tomando como referencia el lado este de la pirámide y al trazar una perpendicular justamente a la mitad, tenemos los días 29 de octubre y 12 de febrero. Si repetimos el ejercicio del lado oeste, obtenemos las alineaciones para el 29 de abril y el 13 de agosto".
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"El templo en su cima (hoy inexistente) permitía ver al Sol rasante, alineado al muro de acceso en la fachada, en lo que se define como alineamientos laterales", agregó el autor del estudio.
