Sartén
Esta imagen muestra el famoso agujero de la sartén, muy útil para la cocina
La función más evidente del agujero es permitir colgar la sartén en ganchos o soportes de pared. Este método de almacenamiento no solo ahorra espacio en cajones o alacenas, sino que también permite tener las sartenes siempre a mano, especialmente en cocinas pequeñas o con poco lugar.
Lo que pocos saben es que ese agujero también puede usarse como soporte para utensilios de cocina. Es decir, puedes insertar el mango de una cuchara de madera, espátula o tenedor de cocina en el orificio, de modo que la parte que estuvo en contacto con los alimentos quede suspendida sobre la sartén o la olla, evitando ensuciar la mesada.
Este truco, además de práctico, es higiénico y ayuda a mantener el área de trabajo limpia mientras cocinas porque es habitual que estos utensilios acaben cubiertos de salsa o aceite mientras cocinamos.
Para esto sirve el agujero en el mango de la sartén
Esta imagen muestra a la perfección para qué se usa ese orificio en la cocina
Algunas sartenes modernas combinan el agujero del mango con vertederas laterales, y en ciertos modelos el agujero sirve para encajar utensilios o para drenar pequeñas cantidades de líquido si se usa junto con una tapa especial. Aunque esto depende del diseño, hay modelos que aprovechan esa característica como parte de un sistema más amplio de cocción eficiente.
Este orificio se encuentra en la mayoría de las sartenes de acero, hierro fundido o aluminio, lo incluyen, especialmente, en modelos más tradicionales o profesionales. Las sartenes con mangos de plástico o recubiertos de silicona a veces no tienen el agujero visible, aunque internamente muchas conservan esta estructura para reforzar el diseño y reducir el peso.