La cuestión de si se puede coger fruta del árbol del vecino cuando está invadiendo tu jardín es un tema legal y ético que puede variar según las circunstancias y la interpretación de la ley
La cuestión de si se puede coger fruta del árbol del vecino cuando está invadiendo tu jardín es un tema legal y ético que puede variar según las circunstancias y la interpretación de la ley. De acuerdo con el Código Civil y Comercial de la Nación, la propiedad de un árbol pertenece al dueño del terreno en el que se encuentra. Si las ramas o frutos del árbol invaden tu propiedad, eso puede generar conflictos. Te contamos sobre las diferentes perspectivas y si es legal.
El Código Civil establece que los frutos caídos de un árbol son parte del propietario del árbol, aunque estos caigan en tu jardín. Sin embargo, no se puede tomar fruta directamente del árbol del vecino sin su consentimiento.
Si el árbol está invadiendo tu espacio, lo recomendable es intentar llegar a un acuerdo amistoso con el vecino para que se encargue de podar las ramas que están sobre tu propiedad o, en su defecto, que te permita recoger las frutas que caen dentro de tu terreno. Si no se llega a un acuerdo, podrías recurrir a la mediación o incluso a la justicia, pero generalmente, las disputas vecinales se resuelven mejor con diálogo y acuerdo mutuo.
El dueño del árbol tiene derecho sobre los frutos aun cuando estos caigan del lado de su vecino. No obstante, el vecino puede solicitar que se corten estas ramas. En caso de que no ejerza este derecho, es entonces que el propietario del árbol puede ejercer su derecho a recolectar los frutos de su árbol.
Aunque puede ser tentador recoger las frutas que caen en tu jardín, legalmente lo más adecuado es pedir permiso al vecino o tratar de resolver la situación de manera amigable, evitando conflictos innecesarios. La ley está diseñada para proteger tanto los derechos de los propietarios como la convivencia entre vecinos.
Según señala el portal abogado las hojas, las vainas o las bellotas que caen en la propiedad adyacente se consideran algo natural y son responsabilidad del propietario en cuyo inmueble caen.