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La amapola fue elegida como la flor del estado de California.
Para cuidar tus amapolas y evitar que se marchiten el riego es clave, debe ser moderado. Estas plantas no necesitan agua a diario, porque el exceso de riego puede dañarlas. Lo ideal es asegurarse de que el suelo esté lo suficientemente húmedo, pero no empapado. Cuando notes que la tierra está seca al tacto, debes regarlas. Además, fertilizar con productos específicos para flores puede proporcionarles los nutrientes necesarios para que crezcan fuertes.
El truco casero que revive esta planta
Si las amapolas de tu jardín han marchitado, no desesperes, porque existe un truco casero para intentar revivirlas. Puedes sumergir los tallos de la planta marchita en agua tibia durante unos minutos para ayudar a que absorban mejor el agua. Este método puede ser útil para rehidratar la amapola y darle un aspecto más fresco en poco tiempo. Pon atención para que la temperatura del agua esté tibia y no demasiado caliente, porque puede ser contraproducente.
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Otra cuestión para tener en cuenta que es importante, es cortar los tallos en un ángulo diagonal antes de colocarlos en agua, ya que esto facilita la absorción. Este truco puede ayudar a que las amapolas recuperen temporalmente su vitalidad, dándoles una segunda oportunidad en tu jardín.