Un grupo de arqueólogos realizó un descubrimiento que desafía lo que se sabe de las costumbres de la época medieval: un pequeño tesoro de 170 monedas de plata. Lo que hizo que el hallazgo sea tan raro fue que se encontró en una tumba, algo que cambia lo que se creía saber sobre las costumbres mortuorias de la zona.

El museo del condado de Jönköping, Suecia, anunció el 27 de marzo que se habían encontrado monedas de plata en la tumba de un hombre de entre 20 y 25 años. Los primeros análisis indicaron que los objetos habían sido acuñados entre 1150 y 1180, es decir, en el medioevo.

Un tesoro enterrado

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El hallazgo se realizó cuando se trabajaba para remodelar una iglesia.

El hallazgo se realizó cuando se trabajaba para remodelar una iglesia.

En total fueron encontrados 170 bracteatos de plata que sorprendieron al mundo de la arqueología. Estas pequeñas piezas de metal son generalmente de medallas planas, muy finas y de una sola cara. Los trabajos se realizaron en una iglesia en donde se ubica un antiguo cementerio, debido a que se iba a cambiar el sistema de calefacción del templo.

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Este descubrimiento se realizó en el primer día de las excavaciones que se tenían planeadas en el cementerio medieval de Brahekyrkan, en la isla de Visingsö. Anna Ödéen, arqueóloga encargada del proyecto, contó que "en el mismísimo primer día, mi colega Kristina Jansson y yo encontramos dos esqueletos en un conducto donde estaba planeado tender los cables".

Un descubrimiento único

Su sorpresa fue mayúscula cuando, junto con los esqueletos, comenzaron a descubrir monedas de plata: "De repente aparecieron tres monedas de plata. Rápidamente nos dimos cuenta de que había muchas más cerca del pie izquierdo de esta persona.

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El descubrimiento cambia mucho de lo que se sabe de la época.

El descubrimiento cambia mucho de lo que se sabe de la época.

El descubrimiento tiene varias aristas que los arqueólogos no esperaban. Una es el hallazgo de 20 corazones, tres de los cuales eran de entre el 50 y 400 d.C., es decir, de la época de hierro de Roma. Otra fue que había 20 tumbas fuera del terreno de la iglesia, es decir, fuera de terreno consagrado, algo que no era común en la época, ya que era algo reservado para personas que morían de maneras contrarias a las costumbres cristianas.

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"Es un descubrimiento sensacional que cambia la historia de las monedas medievales en Götaland, y arroja luz a un período que es ampliamente desconocido", señaló Eeva Jonsson, del Gabinete Real de Monedas, un importante museo de Estocolmo.