Un grupo de ciudadanos que no llegó a las 100 personas acompañó un reclamo contra la creación de un banco de tierras rurales que contempla la expropiación de propiedades que mantengan deudas con Irrigación.
Todo comenzó a las 11.15 cuando un grupo minúsculo cortó el tránsito en el kilómetro cero y una caravana con 15 autos se acercó por avenida Mitre hasta ese lugar.
La manifestación se desarrolló en un clima calmo en el que se reunieron representantes gremiales, la Unión de Empleados de Comercio y ATE, que dialogaron con los políticos de la oposición que se acercaron al kilómetro cero.
Entre los políticos estaban los diputados Alejandro Limas (UCR), Aníbal Ríos (PD), el senador Armando Camerucci (UCR) y los concejales radicales Juan Pablo Eraso y Lucas Quesada. También se acercó el diputado justicialista Raúl Guerra quien señaló a Diario Uno que "hay una mala interpretación de la Ley porque el Gobierno de Paco Pérez no le va a quitar las tierras a los productores sino que va a recuperar los predios que están en el Fondo residual y la idea es volver a ponerlas en valor e introducirlas al circuito productivo".
El legislador agregó que "se utiliza el término expropiación con malintención política porque eso llama la atención y produce temor entre los productores". También dijo que la semana próxima "el gobierno va impulsar un proyecto de ley que le va a permitir a muchos productores del Sur de la provincia poder ordenar y blanquear sus deudas".
Desde el radicalismo, Alejandro Limas expresó que "esto es de una gravedad absoluta porque acá no se quiere expropiar la tierra sino el agua" y añadió que "no se está hablando del verdadero problema que tiene el sector agrícola que no consigue la rentabilidad en sus productos" y remarcó que "la gente que no ha pagado sus deudas es porque no hay una política direccionada hacia la producción que le permita a los productores vivir de su trabajo".
Los organizadores de la maniefestación prometieron una nueva concentración para el próximo miércoles y señalaron que "mientras haya sangre en las venas de los agricultores, no vamos a bajar los brazos".
