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"Paz, pan y trabajo; la dictadura abajo", era una de las consignas de aquella marcha encabezada por Ubaldini.
Extender el "aporte solidario"
El escrito se reconoce explícitamente dentro de la órbita del FdT, definido entre sus párrafos como "nuestro gobierno".
Sin embargo, hace una aclaración que suena a advertencia: "Los trabajadores -dice la misiva- no vamos a renunciar a la lucha para exigir acciones concretas y urgentes que, a la vez, garanticen la mejora real de las condiciones de vida de las grandes mayorías".
Tras poner en valor la experiencia histórica de la movilización convocada por Saúl Ubaldini, quienes suscriben dejan caer un diagnóstico vinculado al pago de la deuda que actualmente mantiene Argentina con el FMI:
"¿Quién va a pagar? ¿El hombre y la mujer de a pie? ¿Los jubilados? ¿Los asalariados que apenas pueden llegar a fin de mes? ¿Los trabajadores de la economía popular? ¿Los comerciantes? ¿Quiénes van a pagar las mieles que disfrutaron un puñado de tránsfugas sinvergüenzas? ¿Quiénes? Los trabajadores y las trabajadoras no estamos dispuestos a hacerlo", avisan.
En consecuencia, los gremialistas proponen que la ley Ley 27.605/21 -el famoso Aporte Solidario o "impuesto a la riqueza"- se prorrogue mientras dure el endeudamiento.
"Que paguen los cien agentes que sabemos que fugaron 24.679 millones de dólares. Que los organismos de control fijen la mirada e investiguen a quienes tienen activos no declarados en el exterior y que paguen los que tienen que pagar", pide el texto.
Contexto
Ampliando el foco, está claro que el comunicado sindical llega en tiempos en que dentro de la alianza gobernante se producen chispazos en relación a la actitud que debe tener la Nación frente al pago de la deuda externa.
Tras una serie de reflexiones cruzadas entre sectores intelectuales -días atrás se difundieron textos pidiendo unidad pero también criticando la "moderación" del presidente Alberto Fernández-; ahora vino esta perspectiva desde el movimiento obrero.
Paralelamente, legisladores nacionales de La Cámpora pusieron a la erogación de la deuda y sus posibles metodologías en el centro de la agenda. Y lo hicieron a través de un proyecto de ley que postula que la recaudación para pagar a los organismos internacionales salga del bolsillo de aquellos que sacaron dinero del país sin declararlo y, por lo tanto, sin pagar impuestos.
El debate está sobre la mesa. Las críticas y reflexiones arrecian desde diversas comarcas del espectro ideológico. También los reclamos.
A continuación, el comunicado completo que difundieron los sindicalistas:
