Carmen Fornés tiene una hija desaparecida, María Cristina D'Amico, secuestrada cuando tenía 22 años en Mar del Plata
El 24 de marzo de este año Kety marchó por última vez y lo en silla de ruedas. Foto gentileza de Miguel Cicconi.
Murió este lunes una de las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo en Mendoza. Se trata de Carmen Fornés, quien en la última marcha del 24 de marzo se movilizó en silla de ruedas.
Conocida como Kety, Carmen es la madre de María Cristina D'Amico, quien fue secuestrada en Mar del Plata y está desaparecida desde el 26 de febrero de 1978.
Desde los organismos de Derechos Humanos de la provincia recordaron a la mujer que falleció en las últimas horas como "una madre de militantes e incansable luchadora por memoria, verdad y justicia".
►TE PUEDE INTERESAR: Masiva marcha y actos por el Día de la Memoria en Plaza de Mayo
En la marcha del 24 de marzo de este año sólo participó una Madre de Plaza de Mayo y fue Carmen Fornés. Las demás han fallecido o no están bien de salud.
La hija de Carmen, María Cristina D'Amico tenía 22 años cuando fue secuestrada y desaparecida, en febrero de 1978, en la ciudad de Mar del Plata. Estudiaba Medicina y militaba en el Partido Comunista.
Su hermano Ricardo fue secuestrado en agosto del '75 en Guaymallén, en el marco de un operativo contra militantes de la Organización Comunista Poder Obrero (OCPO). Permaneció más de seis años en cautiverio y fue liberado.
El Espacio Provincial de la Memoria, que funciona en donde operó el centro clandetinos de detencion D 2, recordó que "desde un principio, y a pesar del terror instaurado, Kety estuvo entre aquellas madres de compañeros y compañeras desaparecidas que iniciaron una procesión de búsqueda por comisarías, cuarteles, oficinas públicas e iglesias que buscaban respuestas sobre el paradero y destino de sus hijos e hijas. En representación de la filial Mendoza, Kety participó del primer encuentro Nacional de Madres, convocado por Hebe de Bonafini para el 11 de marzo de 1981, en la ciudad de La Plata, y siguió formando parte de los encuentros ya en democracia".
Y finalizó: "Mientras su salud se lo permitió, siguió participando de movilizaciones y acciones por memoria, verdad y justicia, con su pañuelo blanco y la pancarta de su hija".