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Marcelo Colombo cruzó a Javier Milei por su postura en contra de la inmigración.
A diferencia de ésta posición y la del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, Colombo afirmó en diálogo con radio Nihuil que “debe evitarse asociar migración con delincuencia porque es falaz”.
La visión de la Iglesia sobre la inmigración
Ante la consulta de Nihuil, monseñor Colombo, hoy representante de la Iglesia Católica a nivel país, dejó en claro la postura a favor de la inmigración en todas sus formas y cuestionó a quienes la asocian con la delincuencia.
“La visión de la Iglesia es siempre la del máximo respeto a la libertad y dignidad de las personas. Esa libertad tantas veces proclamada por algunos sectores, en la mirada de la Iglesia, no debiera excluir la posibilidad de buscar un futuro mejor en otros horizontes cuando en el propio país no resulta posible”, analizó Colombo.
“Nosotros –por Argentina- somos un país nacido del fruto de la interacción de tantas migraciones que no podríamos prescindir de esa mirada de la Iglesia sin contradecir nuestra propia historia”, señaló.
Colombo marcó puntualmente que es “falaz” asociar inmigración con delincuencia y destacó el caso de migrantes en Estados Unidos: “Son fuerza de trabajo y se han integrado con mucha facilidad”.
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Familias inmigrantes en Estados Unidos.
Monseñor citó al papa Francisco y recordó que ha sido claro desde el comienzo de su pontificado a la hora de “señalar la dureza de algunas legislaciones europeas y la crueldad de muchas administraciones para acoger a los migrantes, muchos de ellos llegando de la absoluta miseria a través del Mediterráneo”.
El Papa desde que comenzó su pontificado ha sido clarísimo en señalar la dureza de algunas legislaciones europeas y la crueldad de muchas administraciones para acoger a los migrantes, muchos de ellos llegando de la absoluta miseria a través del Mediterráneo.
Y que es por eso que, al conocerse las medidas en materia migratoria de Donald Trump, “recordó el valor de cuidar a los migrantes”.
Y en ese camino, Colombo reconoció que son los Estados y sus responsables quienes tienen la tarea de “establecer las mejores legislaciones, que conjuguen la generosidad de la apertura del país que recibe y el máximo cuidado en las disposiciones y procesos de incorporación de los migrantes”.