En ese sentido el SUTE es una facción que si bien tiene una conducción elegida por el voto de sus afiliados, su finalidad central es defender a un sector y no el interés general, algo a lo que sí está obligado un gobierno constitucional.
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Aprovechar la volteada
Es indudable que el Gobierno provincial está ante un problema, que parecía haberse borrado desde que se implementó el Ítem Aula a principios del gobierno de Cornejo con el que se buscó frenar las inasistencias reiteradas de muchos docentes y desalentar los paros. Ahora el Ítem Aula ha sido licuado porque se calcula sobre los haberes en blanco y desde hace un tiempo el sueldo docente incluye bonos en negro.
El apoyo de un sector importante de la sociedad a los docentes por sus devaluados sueldos debería ser leído, por eso, puntillosamente. Todo indicaría que hay una revalorización social de la actividad docente. Y que maestros y profesores ya no temen perder el plus salarial que significa el Ítem Aula.
Políticamente el gremio ha aprovechado esta volada para vender las movilizaciones como un apoyo a su gestión y por eso es que en la última marcha logró sumar a otros gremios estatales y a los movimientos sociales y piqueteros, dando así una idea de descontento social más general, y centrándose en que el malo principal es Rodolfo Suarez y que el gobierno nacional es ajeno.
"Y después dicen que no quieren kirchnerizar la protesta de los docentes. Esa protesta en Mendoza es política y está dirigida por La Cámpora", asegura por ejemplo el diputado provincial de la UCR Diego Costarelli. Debió decir "esa protesta es partidaria". Basta repasar algunos videos de actos militantes para comprobar que el PJ provincial, que no daba pie con bola en Mendoza, tiene ahora ahora una pequeña base de sustentación en el SUTE donde su nueva conducción no esconde su pertenencia kirchnerista.
Gustavo Correa, secretario adjunto del SUTE, afirma en uno de esos videos que "tenemos que lograr la mayor unidad posible para enfrentar al Gobierno de la Provincia y para volver a gobernar esta provincia y para que a Mendoza la gobierne el campo nacional y popular". Es evidente que no habla el dirigente gremial de los docentes mendocinos sino el militante político, el "cuadro" político, como le gusta decir a Cristina.
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Paro docente: políticamente el SUTE ha aprovechado esta volada para vender las movilizaciones como un apoyo a su gestión.
Foto: Martín Pravata
Incumbencia
El Gobierno provincial, que suele pecar, entre otras cosas, de no ser didáctico para explicar políticamente determinados asuntos de gestión, trató esta vez de remarcar que la inflación y todos los problemas macroeconómicos corresponden al Gobierno nacional y que la responsabilidad central es del kirchnerismo gobernante, sector al que responde la actual conducción del SUTE.
Ello de ninguna manera le quita incumbencia a la Provincia. Los docentes cobran sus sueldos aquí, de una administración que fue elegida por los mendocinos, de una "caja" provincial, y donde los beneficiarios centrales del sistema educativo son niños y adolescentes de Mendoza que llevan perdidos muchos días de clases, dos de esas jornadas apañadas por sus padres que no los mandaron a la escuela "en solidaridad" con las "seño".
Ante las nuevas cifras escandalosas que dejó la inflación de julio (7% en Mendoza y 7,4% a nivel nacional), Suarez reabrió este viernes 12 la paritaria para volver a discutir -desde el jueves 18- la reactualización salarial de todos los estatales, en particular de los docentes que son la masa más grande de empleados públicos.
Será interesante ver cómo se manejan ahora todos los actores políticos de este drama. En particular, cómo la lleva el Gobierno, que con rapidez debería definir políticamente de qué forma recuperará parte de la consideración ciudadana que en todo este berenjenal ha quedado un poco difusa.
Pero también será una prueba para el gremio docente que también deberá dar examen ante la sociedad. La inflexibilidad extrema es un disvalor para el grueso de la población.
La yapa con Ari
La política, esa que los propios políticos actuales suelen denigrar por falsaria, es la que llevó en su momento a Aristóteles a decir cosas como ésta: "Donde menos se producen sediciones y discordias entre los ciudadanos es donde no predominan los extremos de ricos y pobres". Así es como presenta este pensador la importancia de la clase media.
O esta otra perla: "Con la política se puede organizar la cosa pública, prepararse para tomar decisiones, llegar a acuerdos y facilitar la vida en sociedad resolviendo conflictos".
Y ya que estamos con el tema educativo, vaya una ocurrencia aristotélica más: "La educación de los niños debe ser uno de los principales objetivos del cuidado del legislador y la educación debe ser única e idéntica para todos sus miembros".
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