Panorama político

IMPSA: acciones a sólo U$S20 mil, la filtración que enojó al Gobierno y cómo sigue la venta

Planean cobrar las acciones de IMPSA al monto mínimo de la licitación. Enojo en el Ejecutivo por un material que se filtró y la cocina de las negociaciones

Este viernes IMPSA pagó los sueldos que debía a sus empleados. Tanto en el Gobierno como desde adentro de la empresa, y aunque no lo registró ningún otro medio, señalan que la firma se puso al día incluso con los aguinaldos, que hasta diciembre se pensó que no se abonarían. Además, por qué se vendieron las acciones a precios insólitos, el camino que se abre hasta el 31 de enero y cómo fue la cocina política de la transacción.

Los salarios se pagaron a través de una suma que bajó el FONDEP (titular de las acciones estatales), explicaron desde el Ejecutivo. Se cree que los salarios de la empresa oscilan entre los 1,2 y 3,5 millones de pesos en su mayoría y a esas cifras hay que multiplicarlas por los 720 empleados que mantuvieron sus puestos.

Sin embargo, el monto que apareció fue muchísimo mayor al necesario para acordar con esos trabajadores, según cuentan: adentro de la firma hablan de 5 mil millones de pesos. Es, entre otros motivos, porque el mismo día también se abonó al menos una cuota del plan de pagos con la ex AFIP, que de no honrarse todos los meses hacen caer todo el cronograma, afirmaron a UNO.

La centenaria metalúrgica es hoy un cúmulo de números, entre los que se deben y los que tendrían que ingresar en los próximos meses; aunque entre los más llamativos están sin dudas los que se pusieron para vender las acciones. “Son simbólicos”, se atajan en Casa de Gobierno, para explicar que todas las acciones que tenía el Estado, tanto Mendoza como Nación, se irán por apenas 20 mil dólares. Ni un cero kilómetro vale eso en la Argentina.

“Es así. Las acciones valen eso y eso es lo que van a pagar los norteamericanos. Pero hay que tener en cuenta que además pondrán los U$S27 millones y que deben hacerse cargo de la deuda, que son más de 500 millones de dólares más”, señala una fuente que está en la negociación desde el minuto uno. “Es como cuando vendieron Parmalat por un euro, que los más jóvenes no se van a acordar. Son precios-símbolo. En realidad, están comprando una bola de deuda y eso pesa”.

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Acuerdo. En noviembre y diciembre, los trabajadores de IMPSA se manifestaron por los sueldos impagos, en el marco de crisis de la empresa.

Acuerdo. En noviembre y diciembre, los trabajadores de IMPSA se manifestaron por los sueldos impagos, en el marco de crisis de la empresa.

Uno: para esos “más jóvenes”, lo de Parmalat es cierto. Ocurrió en diciembre de 2004 y la firma también estaba en rojo: debía 70 millones de dólares. Dos: si los 20 mil dólares en que se cotizaron las acciones llaman la atención, también lo hace, para muchos, el precio que valieron los pliegos cuando se lanzó la licitación que buscó inversores. Fue de apenas mil pesos por pliego. O sea que si ARC pagó en dólares, le salió 98 centavos.

Está en el Boletín Oficial del 1 de octubre de 2024.

Cómo será la capitalización de IMPSA

Los 27 millones de dólares que pondrá ARC Energy, a diferencia de lo que alguno podía pensar, no tienen que ver con las acciones, sino sólo con la capitalización, como se ha aclarado en los últmos días. De hecho coinciden con el dato de cuánto dinero necesita IMPSA para funcionar en un año, cuál es el flujo que requiere para estar operativa y competitiva: adentro de la empresa dicen que son 30 millones de dólares. Casi lo que los norteamericanos invertirán a lo largo de 2025, según se espera.

En otra vereda está la deuda: concretamente son 566 millones de dólares que, de acuerdo al informe oficial que le adjudican a Gabriel Vienni –nombrado presidente de la empresa en tiempos de Alberto Fernádez- tuvieron período de gracia hasta 2025. O sea, hay que empezar a pagar ahora.

La información marca que esa deuda, tras su última reestructuración, tiene intereses del 1,5% anual sobre los saldos pendientes desde el 31 de diciembre de 2019. A su vez, hay que rescatar que IMPSA no viene sobreviviendo sólo gracias a contratos conseguidos en su etapa estatal, sino también a aportes del gobierno nacional: en 2021 recibió $ 1.800 millones y en 2022, $2.200 millones. Al tipo de cambio de esa época se estima que fueron 34 millones de dólares, aproximadamente.

Durante el período 2021-2024, que está por terminarse con la vuelta de IMPSA a la senda privada, se sumaron al menos 26 proyectos nuevos para trabajar. Sólo en 2022 y 2023, de acuerdo a data oficial, esos proyectos implicaron 293 millones de dólares. Aunque casi todos los clientes ahí fueron el propio Estado: provincias como Córdoba y San Juan y el Ejército Argentino. Entre privados sólo aparecen la australiana Fortescue, Dioxitec y Nucleoeléctrica S.A, que es privada, pero en la cual también aparece como propietario el Estado.

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ARC, la única empresa que se mostró interesada en comprar las acciones de IMPSA hasta el final. Aquí, un representante de la firma, con Alfredo Cornejo.

ARC, la única empresa que se mostró interesada en comprar las acciones de IMPSA hasta el final. Aquí, un representante de la firma, con Alfredo Cornejo.

IMPSA: los intentos para que Venezuela pague

La deuda autodestructiva que tiene IMPSA se explica, entre otras causas, por los montos que jamás honró el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, algo que muy rara vez mencionan los dirigentes kirchneristas que se quejan de que ahora se venda a bajo precio. En el recorrido para llegar a donde está, la firma y sus abogados se movieron para ver si algo de ese dinero (supuestamente por 10 turbinas tipo Kaplan para la central de Tocoma, en el Estado de Bolívar) podía entrar. Uno de esos intentos fue triangular con Cammesa, la administradora del mercado eléctrico mayorista.

La idea –al parecer concebida entre 2021 y 2022- fue que Cammesa pudiera importar combustible más barato desde Venezuela. Más barato porque sería a cuenta de lo que el régimen chavista le debía a la firma mendocina. Después Cammesa le devolvería, cerrando el círculo, los montos a los mendocinos.

El valor del que hablan en la documentación a la que accedió UNO (un prototipo de memorándum de entendimiento) es U$S 28.180.757 con 37 centavos. incluía, en su apartado 5.1, una cláusula de confidencialidad. Nunca avanzó nada.

IMPSA: en la cocina de las negociaciones

El 31 de enero termina el recorrido que empezó a mediados de año, cuando ARC empezó a interesarse por IMPSA. Pablo Magistocchi, presidente de Emesa y ex director de la metalmecánica local, fue el encargado de recibir a los primeros emisarios, según cuentan cerca de la empresa.

“En realidad, en el círculo de los compradores ya sabían bastante sobre la firma, porque el sanrafaelino Juan Carlos Fernández, en algún momento cercano a Enrique Pescarmona, le contó muchas muchas cosas de IMPSA al emprendedor venezolano Hidalgo Socorro, que de alguna manera está cerca”, dijo una fuente que conoce los intersticios del proceso.

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¿IMPSA vuelve a surgir? El deseo del Estado mendocino.

¿IMPSA vuelve a surgir? El deseo del Estado mendocino.

Adentro de IMPSA dicen que Magistocchi llevó a los enviados a su primera reunión con Alfredo Cornejo y también los introdujo a las instalaciones, donde pasaron cerca de cuatro horas recorriendo y preguntando. Fue en mayo, apenas días después de que apareciese la carta de intención para hacerse con la siderúrgica, el 30 de abril.

Es cierto que ARC Energy fue la única que avanzó hasta el final y mejoró sus propuestas, pero hubo varias interesadas. No sólo la cantidad que compró pliegos para participar, sino los que consultaron y solicitaron ingresar al Data Room, el mecanismo previo a la etapa de due dilligence a través de la cual se hacían de información.

Entre ellas, cerca del actual directorio mencionan por ejemplo a la alemana Voith, que en épocas de Mauricio Macri compitió contra IMPSA por la licitación de la represa de Yaciretá (y les ganó a los mendocinos). Voith es señalada por tener una supuesta expertise específica en centrales hidroeléctricas añosas, como la mayoría de las que hay en Argentina. Además señalan a WST, cercana al Grupo Werthein y a la brasileña Atlantis SG, de Belo Horizonte, Brasil.

Empezaron semanas decisivas. De acá al 31 de enero, fundamentalmente se trabajará en la documentación para la compraventa que garantice el traspaso de las acciones. Aunque en los papeles quienes más trabajarán son los miembros de la Comisión Evaluadora –los mismos que dieron el sí a la propuesta de ARC-, también participarán Auditoría y Fiscalía de Estado de Mendoza, Ministerio de Energía y Ambiente y hasta la Procuración del Tesoro de la Nación.

Hay varios elementos que discutir, aunque lo fuerte está cerrado. Los ejes más importantes se especificaron en el documento del acuerdo, que se difundió a primera hora del miércoles. Esa filtración molestó bastante en el Ejecutivo local, porque la idea original, aseguran, no era llevarlo ni a la prensa ni a la opinión pública. “Es algo interno de las partes, todavía no sabemos quién pasó ni por qué”, dijo un alto mando del Gobierno.

Pero ni ese detalle ni los elementos que aún resta debatir son lo más importante de esta historia. Lo que más vale es que IMPSA sigue viva. Y que 720 personas estuvieron a punto de quedar en la calle y finalmente lograron conservar su trabajo. Eso opinan adentro.

Probablemente tengan razón.

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