Acuerdo con el FMI

En el peronismo mendocino aseguran que no habrá repercusiones por el voto negativo de La Cámpora

Desde el espacio de Anabel Fernández Sagasti dicen que la votación dividida no quebrará los acuerdos provinciales. Pero hay sectores del peronismo que están muy disgustados con la conducción local y esperan que el impacto le quite poder a la Cámpora

Es que aquellos peronistas que no se sienten dentro del sector liderado a nivel nacional por la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, y a nivel provincial por Anabel Fernández Sagasti, la votación en negativo de la propuesta del presidente, es el golpe de efecto que esperan para apurar una ruptura con el camporismo. El sentimiento no viene liderado por los intendentes, ni por los legisladores nacionales, sino más bien por la militancia. Son ellos los que piden un cambio de rumbo en la conducción.

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Consultado por esta problemática, el diputado nacional Adolfo Bermejo aseguró que si bien piensan que la votación del acuerdo con el FMI no va a cambiar "en nada" la situación del peronismo local, también asumió que "las bases están muy disgustadas por los reiterados fracasos electorales. Esto genera un gran enojo".

Sin embargo, tanto desde su sector, como del de otros líderes de departamentos peronistas, aseguraron que la división no es conveniente en la actualidad. Por esto el PJ local no se rompería -aunque hay muchos roces y muy profundos- sino que más bien lo que tienen que hacer es reunirse para conciliar.

Hay preocupación dentro del peronismo mendocino

Si bien puede que no haya grandes repercusiones acerca de la votación por el acuerdo con el FMI de los miembros camporistas del parlamento nacional, como podría serlo que se les pida la renuncia a aquellos que poseen cargos nacionales y militan en la Cámpora, sí hay disgustos. El del acuerdo es uno más, pero no el más importante.

La mayor de las incomodidades pasa por encontrar otro líder para el partido a nivel local, porque necesitan reunificarse y ordenarse. Además, que sea capaz de aglutinar el poder que en este momento está atomizado en Mendoza.

Desde el sector del sur, hay peronistas que ven esta situación con gran preocupación y que piden una reunión con urgencia. Mientas, otros más ligados al Gran Mendoza, aseguran que esas reuniones ya estaban ocurriendo entre algunos intendentes, pero debieron ralentizarse con el problema de salud del cacique comunal de San Rafael, Emir Félix.

Por el momento, lo que se espera es que estas reuniones se vayan concretando y que el partido comience a armarse de cara a las elecciones 2023.