Nicolás Gil Pereg, ex militar israelí de 36 años, acusado por los asesinatos de su madre y su tía en Mendoza, volvió a ser noticia en las últimas horas, nuevamente a raíz de sus particulares conductas. El hombre que tiempo atrás se creía un gato, se niega a bañarse por temor al agua. Sus abogados expusieron que se trata de una fobia y denunciaron que les contó que fue maltratado para ser higienizado.
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“Quiero estar lejos de la gente, los únicos que me entienden son los gatos”, había dicho hace un tiempo. Ahora sus defensores adelantaron que interpondrán un recurso de amparo para proteger la integridad del ex militar. Maximiliano Legrand, su abogado, narró que el miércoles Pereg lo llamó en un estado de desesperación tras lo sucedido.
En diálogo con Infobae fuentes del Ministerio de Seguridad de Mendoza adjudicaron las acusaciones a una “maniobra de la defensa” y negaron que Pereg haya sufrido algún tipo de agresión en el penal de San Felipe, donde aguarda la elevación a juicio.
“Ellos (personal penitenciario) saben que tiene fobia al agua, y nos llamó muy exaltado diciendo que se iba a suicidar porque lo habían bañado”, argumentó en diálogo con Canal 9 de Mendoza Legrand , sobre el habeas corpus que presentó.
En base al relato del abogado su cliente fue esposado, golpeado e incluso tirado al piso para ser bañado. “Todos han determinado que él es un paciente psiquiátrico y tiene una patología con respecto al agua”, siguió.
La defensa además hizo trascender que se baraja el traslado del militar a una institución en Buenos Aires, aunque la justicia mendocino descartó también en diálogo con este medio esa posibilidad e insistió con un artilugio de la defensa para beneficiarlo.