En ese momento los delincuentes supieron que habían conseguido lo que buscaban y tenían a la víctima en sus manos.
Le dijeron que para recuperar a su hijo debía entregar elementos de valor y que debía llevarlos a un determinado lugar en el interior del barrio 16 de Junio, de Guaymallén.
Hasta allí fue el hombre en shock y desesperado porque no le pasara nada a su hijo y dejó en el lugar indicado dos teléfonos, un televisor y un equipo de música.
Mientras tanto, su esposa llamó a su hijo y verificó que estaba en buen estado en su casa, por lo que de inmediato se comunicó con la Policía y contó lo que estaba pasando, pero ya era tarde, porque su marido ya había hecho la entrega.
De hecho, su propio hijo, el que supuestamente estaba secuestrado, salió a buscar a su padre. Cuando se encontraron, el hombre se enteró que había sido víctima de una estafa.
La Investigación quedó a cargo de la Oficina Fiscal N° 14 sin detenidos, ya que la Policía no logró llegar antes que los ladrones se llevaran los elementos entregados por las víctimas.