El caso por de la desaparición de Soledad Olivera (28) sigue aportando capítulos, y en la jornada de ayer se desarrolló una audiencia clave en la continuidad de la causa. El abogado querellante, Fernando Peñaloza, expuso ante la Suprema Corte de Justicia los argumentos de su pedido desde Casación para que el fallo absolutorio sobre el imputado sea revisado. Volvió a reclamar una condena por homicidio y sostuvo que fue un caso de violencia de género.
Mariano Luque (30), también imputado en el caso de Johana Chacón (13), fue absuelto el año pasado en el juicio sobre privación ilegítima de la libertad que tiene como víctima a Olivera, vista por última vez el 18 de noviembre del 2011 en Lavalle.
Tras esa resolución, Peñaloza, abogado de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, presentó en los últimos días un recurso de Casación para rever la sentencia. Ayer, ante los miembros de la corte Mario Adaro, Omar Palermo y Herman Salvini, el procurador general Rodolfo González y los representantes de la defensa, explicó su postura.
El letrado señaló que la valoración de las pruebas contra Luque no se hizo desde una perspectiva de un caso de violencia de género. "Al momento de analizar y valorar la prueba no existió ningún tipo de consideración vinculada a la perspectiva de género, cuando el caso es paradigmático de violencia de género", remarcó. La gran cantidad de mensajes de texto que cruzó Soledad el último día que fue vista con el acusado es muestra cabal de la relación que había entre ambos.
Además, Peñaloza solicitó que se realice una calificación jurídica similar a los juicios de lesa humanidad, en los que se imputa homicidio en lugar de desaparición, a pesar de no haberse encontrado el cuerpo de Olivera.
Al considerar que todas las pruebas comprometen a Luque, pidió una condena de 20 años por homicidio simple.
El procurador Rodolfo González coincidió con el querellante en analizar el caso en el marco de género, aunque no en la calificación de homicidio. Planteó la posibilidad de anular el fallo y realizar un nuevo juicio, o bien acceder a la Casación y dictar otra condena.
"Un nuevo juicio me parecería desgastante e innecesario. También hay que pensar en los derechos de Luque", puntualizó Peñaloza.
Los abogados defensores del sospechoso, Rodolfo Aguilar y su hija María del Carmen, rechazaron lo planteado y piden recordar las pruebas que llevaron a su absolución.
La Corte deberá llamar a una nueva audiencia de debate y luego se tomará un tiempo para resolver la situación. Se estima que en un mes habrá una definición y que no se extenderá más al ser un caso sensible para la sociedad.