Los padres de un niño de 13 años que mató a su primo de 9 años de un tiro cuando jugaba con un revólver, han sido acusados por la muerte del menor, informó AP citando las declaraciones de las autoridades de Tennessee emitidas el miércoles último en Estados Unidos.
Los menores quedaron solos en la casa y uno de ellos buscó un arma en el dormitorio principal de la casa. Y eso terminó en una tragedia
Latria Johnson, de 28 años, y su novia Lindsey Williams, de 27, enfrentan cargos de homicidio por negligencia criminal y han sido acusados de poner en peligro la seguridad de un menor, según un comunicado de la Fiscalía del condado de Shelby.
Los investigadores señalaron que los dos menores estaban solos el 13 de marzo en un departamento en Cordova, un suburbio de Memphis, mientras sus madres salían de compras.
Sin querer jaló el gatillo
El niño que activó el arma, cuya identidad no ha sido revelada, tomó el revólver calibre .40 que pertenecía a su padre del dormitorio principal y sin querer jaló el gatillo impactando contra Xavier Jackson, quien falleció tras recibir un disparo en la cara.
De acuerdo con el testimonio de las autoridades, el arma estaba en un lugar donde los niños podían acceder a ella.
Por su parte, Williams expresó en una declaración jurada de la Policía que habitualmente dejaba el arma cargada cerca de la repisa de una ventana y que su hijo lo sabía.
Por su parte, la madre fue acusada de resistencia al arresto cuando la Policía intentó ingresar a la vivienda. Por ahora, la pareja se encuentra en libertad.
Mientras tanto, el abogado de la familia, John Keith Perry, explicó que las madres dejaron a los menores solos en la vivienda durante menos de una hora. "Fue un accidente horrible que le puede suceder a la gente mejor intencionada", argumentó el representante.
