(Editado por Analía Doña) Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, principal cabecilla de la banda criminal más grande de Colombia, el Clan del Golfo, fue detenido, según anunció el Gobierno colombiano. "Es el golpe más duro que se le ha propinado al narcotráfico en este siglo en nuestro país. Es solamente comparable con la caída de Pablo Escobar en los años 90", dijo al celebrar la noticia el presidente Iván Duque.
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Otoniel, el temido jefe del Clan del Golfo, era el narcotraficante más buscado de Colombia. Durante más de seis años burló la intensa persecución de miles de policías y soldados que peinaron pueblos y selvas de la región del Urabá, en el noreste del país y fronteriza con Panamá.
Estaba desde 2013 en la Lista Clinton. Las autoridades colombianas ofrecían una recompensa de casi 800.000 dólares y el estadounidense, 5 millones de dólares.
En los últimos meses, Úsuga estaba refugiado en una zona rural del departamento de Antioquia rodeado de miembros de seguridad y médicos que le controlaban sus problemas de tensión y diabetes.
Según el Gobierno, el Clan del Golfo es responsable del envío de toneladas de cocaína a Estados Unidos, así como de montar una red criminal dedicada a cobrar extorsiones a empresarios y comerciantes en la región de Urabá, fronteriza con Panamá, y en la costa Atlántica principalmente.
"Alias Otoniel era el narcotraficante más temido en todo el mundo, asesino de policías, soldados, líderes sociales, reclutador de menores", señaló Duque.
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Otoniel, al frente del Clan del Golfo
Dairo Antonio Úsuga nació en Antioquia el 15 de septiembre de 1971. A los 16 años se sumó junto a su hermano a las filas del desaparecido movimiento guerrillero Ejército Popular de Liberación (EPL).
Luego, junto a su hermano Juan de Dios Úsuga David, alias Giovanni, se vinculó a las FARC y más tarde, a los paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia.
En 2005 los hermanos se unieron bajo el mando del jefe narco Daniel Rendón Herrera, alias Don Mario, encargado de lavar activos y pagar extorsiones.
Con la caída de Don Mario en 2009, Otoniel y Giovanni quedaron a cargo del Clan del Golfo. Cuando su hermano murió a manos de la Policía en una narcofiesta de fin de año, el 1 de enero de 2012, Otoniel se convirtió en el líder máximo de la organización.
La familia unida
El Clan del Golfo fue conocido inicialmente como los Urabeños, por la región de Urabá donde opera. La organización era familiar.
Francisco José Morelo Peñata, alias El Negro Sarley (muerto abril de 2013), tenía una relación sentimental con una de las hermanas de Otoniel.
La encargada de las finanzas del grupo era la pareja de Otoniel, Blanca Senobia Madrid Benjumea, alias La Flaca, capturada en 2015.
El contacto con los carteles mexicanos y Centroamérica era un sobrino de Otoniel e hijastro de El Negro Sarley, Harlison Úsuga, alias Pedro Arias, también capturado en 2015.
En 2012, fue capturado en Honduras Alexander Montoya Úsuga alias El Flaco, un primo de Otoniel.
En los últimos meses el Gobierno de Colombia había anunciado las bajas de algunos de sus aliados más próximos: el primo de Otoniel Harlinson Úsuga Úsuga, alias Orejas, fue extraditado a EE.UU. en marzo, mientras que ese mismo mes también se detuvo a su hermana, Nini Jhoana Úsuga, alias La Negra, jefa de finanzas de la banda.
Un mes antes ya se había detenido a Nelson Darío Hurtado Simanca, alias Marihuano, quien se consideraba el número 2 de la banda.
Los trucos de Otoniel
Para evadir a las autoridades por años, según la prensa colombiana, Otoniel no usaba aparatos tecnológicos como teléfonos celulares, por lo que se comunicaba con los miembros de su organización enviando mensajes de voz que eran distribuidos en grabadores y memorias USB por correos humanos.
Como Pablo Escobar, cambiaba constantemente de lugar y pasaba las noches, usualmente en la selva, en chozas de madera.
Cada vez que las autoridades llegaban a una de ellas, Otoniel ya no estaba pero sí quedaban sus rastros: televisores de pantalla gigante, bebidas costosas y perfumes de lujo.
Lo que también se encontraba en cada una de sus guaridas era otro elemento distintivo del paso de Otoniel: costosos colchones especiales, que le ayudaban a amainar las molestias de una hernia de disco.
Con información de EFE y BBC